La tensión entre Javier Milei y Victoria Villarruel sumó un nuevo capítulo. Luego de que el presidente la tildara de "traidora" por permitir una sesión en el Senado que avaló leyes contrarias al ajuste fiscal del Gobierno, la vicepresidenta salió al cruce con una respuesta contundente.

"Que ahorre en viajes y en la SIDE", disparó Villarruel en su cuenta de Instagram, marcando distancia con el discurso oficialista y defendiendo su rol institucional.

"Un jubilado no puede esperar", dijo Villarruel

Lejos de esquivar la polémica, Villarruel justificó su decisión de habilitar la sesión: "Si hay equilibrio, entonces asistir a los más desprotegidos no debiera ser tan terrible. Un jubilado no puede esperar y un discapacitado menos".

Sus palabras apuntaron directamente a la lógica fiscalista del Gobierno libertario, que cuestionó duramente el avance de proyectos con impacto presupuestario en el Senado.

Acusaciones cruzadas y tensión política en el oficialismo

Las críticas no llegaron solo desde la Casa Rosada. La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, también se sumó a los cuestionamientos y acusó a Villarruel de ser "cómplice del kirchnerismo".

La interna dentro del oficialismo se vuelve cada vez más visible, mientras el Congreso avanza con proyectos que muestran grietas en la estrategia libertaria. Villarruel, por su parte, reafirmó su compromiso con los sectores vulnerables y se desmarcó del discurso más duro del Ejecutivo.