El oficialismo busca amortiguar el golpe y cambia de estrategia

Después del shock inicial por la difusión de los audios del exfuncionario Diego Spagnuolo, en el entorno de Javier Milei admiten que la reacción oficial fue errática. "La semana pasada estábamos groguis", reconoció un funcionario cercano a Casa Rosada. Ahora, con las elecciones cerca, el Gobierno intenta recuperar la iniciativa y empezar a hablar del tema públicamente.

La estrategia es no alimentar la polémica, pero tampoco esquivarla. Martín Menem salió a respaldar a su primo "Lule" y a Karina Milei, acusando una operación política. Mientras tanto, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, sigue siendo el principal vocero en la línea oficial: defendió al entorno presidencial y cuestionó a Spagnuolo, quien ya se presentó ante la Justicia.

Sospechas, grabaciones y la amenaza de más filtraciones

En Balcarce 50 crecen las sospechas de que los audios fueron parte de un "negocio" armado por alguien cercano a Spagnuolo. Según una de las hipótesis más fuertes, habría existido una recolección sistemática de conversaciones que luego fueron vendidas. La mayor preocupación ahora es que no se trata solo de grabaciones del exfuncionario, sino de material sensible de reuniones dentro de la Casa Rosada.

El canal que difundió las grabaciones más recientes confirmó que Karina Milei también fue grabada, lo que encendió las alarmas en el corazón del poder libertario. "Tienen un año de audios, puede pasar cualquier cosa", admitió una fuente oficial. La información se estaría dosificando estratégicamente y algunos en el Gobierno creen que una exintegrante de La Libertad Avanza podría estar detrás de la filtración.

Un Gabinete tensionado y en revisión

Aunque hoy nadie habla de desplazamientos inminentes, en el Gobierno ya se preparan para una reconfiguración del Gabinete tras las elecciones de octubre. La salida de Patricia Bullrich y Luis Petri al Congreso obliga a rediseñar el equipo, pero también lo hace el desgaste interno y los conflictos con los Menem, cuyo vínculo con el círculo de Karina Milei está prácticamente roto.

En ese marco, Guillermo Francos salió fortalecido. Pese a rumores que lo ubicaban en la cuerda floja, Milei lo respaldó públicamente y lo sigue considerando una pieza clave. La interna, sin embargo, sigue latiendo y el escándalo de los audios habría puesto en pausa la avanzada del "karinismo" dentro del Gabinete.

Mientras tanto, los libertarios intentan correr el eje de la conversación pública y volver al relato electoral clásico: "kirchnerismo vs libertad". Pero el caso Spagnuolo todavía tiene capítulos por contar.