El presidente, Javier Milei, llegó la noche del sábado al Aeropuerto de Navegantes en Camboriú y se dirigió a un hotel céntrico donde fue recibido por el exmandatario brasileño, Jair Bolsonaro. En el hall de ingreso, ante decenas de personas, ambos se fundieron en un cálido abrazo y luego se reunieron para ver el partido de la Selección de Brasil, que fue eliminada por Uruguay en la definición por penales de los cuartos de final de la Copa América.

Además de Bolsonaro, Milei fue saludado por los gobernadores de Santa Catarina y Sao Paulo, Jorginho Mello y Tarcísio de Freitas. Más tarde, Mello publicó una foto junto al jefe de Estado argentino en la red social X, con el siguiente mensaje: "Un honor recibir al hombre que está salvando a Argentina, Javier Milei. ¡Viva la libertad!".

Milei en Brasil

Este domingo, Milei será el orador principal de la última jornada de la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC) en Camboriú, municipio brasileño del estado de Santa Catarina. Además del presidente argentino, otro de los disertadores será el vocero Manuel Adorni.

La CPAC es una de las entidades más importantes del conservadurismo en el mundo, lanzada en 1974. Milei ya participó en una de sus ediciones el 24 de febrero pasado en Washington. Con entradas agotadas, la conferencia ofrece acceso a la transmisión oficial por 21,90 reales, unos 5.700 pesos argentinos.

La presencia del líder libertario en Brasil se da en medio de la tensión con su par Lula da Silva, cuyo gobierno no descarta retirar a su embajador de Buenos Aires si Milei apunta contra el mandatario en su discurso. Una medida de represalia como esa no ocurre desde 1906, cuando el entonces ministro de Relaciones Exteriores de Brasil, Barón Rio Branco, convocó al embajador de su país en Argentina en medio de conflictos por la demarcación de fronteras bilaterales.

Hace diez días, Lula da Silva afirmó que Milei debe disculparse con él y su país porque dijo "muchas tonterías". Ante esto, el presidente argentino se negó al reclamo.