Milei califica de "espías" a periodistas y redobla su ataque contra la libertad de expresión
Tras la difusión de los audios de Karina Milei que el Gobierno intentó censurar, el presidente Javier Milei denunció una "red de espionaje" y advirtió que los periodistas "no están por encima de la ley". Martín Menem justificó la grabación como "hipotética" y acusó a la oposición de desestabilizar al Gobierno.
"Espías que se disfrazan de periodistas"
El presidente Javier Milei intensificó su embestida contra la prensa después de que medios uruguayos difundieran audios atribuidos a Karina Milei, cuya circulación había sido prohibida en Argentina por orden judicial.
A través de sus redes, Milei acusó a los periodistas que revelaron los audios de ser parte de "una red de espionaje ilegal" y advirtió: "Se creen impunes y no lo son". Entre los mencionados están periodistas de Radio 10, Carnaval y C5N, cuyos domicilios casi fueron allanados por pedido de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
"Estos espías que se disfrazan de ‘periodistas' quieren desviar la atención del tema real", agregó Milei, sin dar más precisiones sobre a qué se refería exactamente.
La estrategia de Martín Menem
El presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, también intervino en el debate público para aclarar su rol en los audios. Según él, la difusión de las grabaciones en las que se lo menciona es "un intento deliberado de desestabilización" en el marco del proceso electoral.
Menem aseguró que los audios, atribuidos a Karina Milei, son "hipotéticos" y fueron grabados en la Presidencia de la Cámara de Diputados, no en la Casa Rosada como afirmó el juez Maraniello. Además, sostuvo que los encuentros donde se registraron las conversaciones son parte de la coordinación parlamentaria y que Karina Milei participa para aportar "conducción política".
El diputado apuntó que la supuesta grabación ilegal forma parte de "operaciones de inteligencia y campañas de difamación" destinadas a desviar la atención del escándalo de presuntas coimas vinculadas a la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS) y a familiares del propio Menem.
Bozal legal y respaldo oficialista
Javier Milei reafirmó la medida cautelar que prohíbe la difusión de los audios, dejando en claro su apoyo a la teoría de la ministra Bullrich sobre una supuesta red de inteligencia contra el Gobierno. "No están por encima de la ley. Se creen impunes y no lo son. Fin", concluyó el presidente.
La diputada oficialista Lilia Lemoine se sumó a la ofensiva y calificó a los periodistas que difundieron los audios como "espías y extorsionistas". Además, justificó que la grabación de Karina Milei fue ilegal, ya que involucraba a la secretaria general de la Presidencia dentro de la Casa de Gobierno.
"Ahí no hay corrupción, en Karina no hay corrupción", insistió Lemoine, cerrando el debate con un claro respaldo a la administración y al bozal impuesto sobre la circulación de los audios.