La confrontación fue intensa y marcada por una furia desenfrenada y profundas divergencias. Javier Milei insultaba y acusaba de "traidora" a su vicepresidenta, mientras que Karina Milei lanzaba términos aún más duros contra Victoria Villarruel. En la Quinta de Olivos, la ira era palpable, con intercambios de insultos y descalificaciones personales. Horas más tarde, Santiago Caputo activó lo que se denominó el "ejército de trolls libertarios" contra la vicepresidenta, con mensajes agresivos que reflejaban la ira del presidente.

La "troika" acusaba a Victoria de "delirios" y la culpaba de estar involucrada en un complot político con "la casta". Karina la tildaba de "trepadora" y de liderar un "complot" político. Mientras tanto, Victoria se refugiaba en el Senado, respondiendo con calma ante los representantes de la Casa Rosada: "Solo estoy aplicando el reglamento del Senado".

Pero en la intimidad de su despacho, Villarruel lanzaba duros ataques contra Karina, refiriéndose a ella como "la tarotista". Incluso el presidente no quedaba exento de críticas, pues no le perdonaba haber incumplido el pacto sobre los ministerios de Seguridad y Defensa.

Hacia el mediodía, se rumoreaba que ambos habían tenido una conversación. Aunque nadie lo confirmaba, se especulaba con mutuos reproches. Milei calificaba a Victoria de "infiel", mientras que ella tachaba al presidente de "desleal". Luego, llegó la nota lapidaria desde la Casa Rosada, revelando la "furia" de Milei. El presidente estaba furioso, consciente de lo que estaba en juego.

La caída del DNU en el Senado este jueves dejaba al descubierto su vulnerabilidad y su débil apoyo político, mostrando su dificultad para implementar lo prometido al FMI. En Washington, surgían dudas sobre su capacidad para llevar a cabo su programa. Esta "crisis" política, la primera en 100 días, dejaba al descubierto una disputa que había comenzado desde el día en que Milei ganó las elecciones.

Desde entonces, las tensiones fueron aumentando, culminando en un enfrentamiento abierto entre Villarruel y Milei. La confrontación escaló cuando Karina vetó la participación de Victoria en un evento junto a su hermano. La venganza no se hizo esperar, y Villarruel bloqueó el nombramiento de ministros propuesto por el presidente.

A partir de entonces, Villarruel comenzó a tejer su propia red política, manteniendo reuniones con el "círculo rojo" y participando en eventos y fiestas organizados por gobernadores e intendentes. Esto contrastaba con la postura de Milei, que evitaba tales eventos.

La situación empeoró cuando Villarruel comenzó a coquetear con Mauricio Macri, lo que generó preocupación en Olivos. Trascendió que Villarruel estaba dispuesta a continuar el proyecto libertario en caso de que Milei se retirara. Esto desató la ira en Olivos, acusándola de intentar boicotear al gobierno.

La reunión con los gobernadores también dejó en evidencia la falta de experiencia de muchos funcionarios. Si bien trascendió que el encuentro fue áspero, fue la denuncia de los gobernadores sobre los ataques de Milei lo que marcó el tono. La ausencia de discusión sobre el DNU reflejaba la inexperiencia de algunos funcionarios.