La CGT se desmarca del PJ y deja en libertad a los gremios ante la marcha por Cristina Kirchner
La central obrera no asistirá a la reunión del PJ y evitó convocar a un paro general. Sólo algunos sindicatos adhieren a la movilización.
En medio del clima político y judicial que rodea a Cristina Kirchner, la CGT decidió no asistir a la reunión convocada por el Consejo Nacional del PJ y dejó en libertad de acción a sus gremios ante una eventual marcha en respaldo a la expresidenta. La resolución fue consensuada este martes al mediodía, en un encuentro realizado en la sede de la Federación de Sanidad (FATSA).
Aunque todavía no se difundió el comunicado oficial, fuentes sindicales indicaron que hubo molestia por las "desprolijidades" en la convocatoria del PJ. El partido había citado a la central obrera el jueves pasado y postergó la reunión para hoy, esperando sumar gobernadores peronistas.
Reacciones divididas y tensiones internas
En la cúpula cegetista hay malestar por la presión de sectores kirchneristas, que buscan una medida de fuerza contundente. Uno de los más señalados fue Abel Furlán (UOM), quien pidió "construir un objetivo común" pero no convocó a paro en su gremio. Lo mismo ocurrió con dirigentes como Mario Manrique (SMATA) y Sergio Palazzo (Bancarios), que públicamente se mostraron a favor de una movilización pero evitaron paralizar actividades.
Solo algunos gremios fuera de la CGT se sumaron a la huelga: la seccional Capital de ATE, el SITRAJU, y las dos CTA, lideradas por Hugo Yasky y Hugo "Cachorro" Godoy. Estas organizaciones ya anunciaron paros para este miércoles.
Grieta sindical en torno al futuro de CFK
La falta de consenso dentro del movimiento obrero quedó expuesta: mientras la CGT opta por una postura moderada, los espacios más cercanos al kirchnerismo apuestan por un paro general y una masiva movilización hacia Comodoro Py, pese a que Cristina Kirchner no deberá presentarse físicamente ante la Justicia, al habérsele otorgado prisión domiciliaria.
La situación evidencia una fractura interna en el peronismo y en el sindicalismo, con la CGT cuidando su institucionalidad y evitando quedar alineada automáticamente con decisiones políticas del kirchnerismo más duro.