El Gobierno busca acordar con la CGT antes de enviar la reforma laboral al Congreso
El Ejecutivo planea reunirse con la nueva conducción de la central obrera para limar diferencias antes de presentar la reforma laboral. La iniciativa apunta a reducir costos de contratación, impuestos y la intervención estatal en los acuerdos entre privados.
Negociación previa: la Casa Rosada quiere evitar el choque sindical
En el Gobierno confirman que planean convocar a la nueva cúpula de la CGT antes de enviar la reforma laboral al Congreso. La idea es acercar posiciones con el sindicalismo y evitar un conflicto abierto con la central obrera, que ya anticipó su rechazo a varias medidas.
El encuentro se realizaría con Cristian Jerónimo (Vidrio), Jorge Sola (Seguros) y Octavio Argüello (Camioneros), los tres dirigentes que encabezan hoy la CGT. En la Casa Rosada admiten que no buscarán centralizar las conversaciones en el Consejo de Mayo, organismo que quedó paralizado tras la salida de Guillermo Francos.
Qué propone la reforma laboral
El borrador que el oficialismo prepara incluye modificaciones a la Ley de Contrato de Trabajo (20.744), con el objetivo de bajar los costos de contratación y aliviar la carga impositiva sobre el empleo formal.
El texto también prevé:
-
Fomentar la mediación y el arbitraje para resolver conflictos sin judicializarlos.
-
Hacer optativo el pago de la cuota solidaria sindical.
-
Limitar el derecho a huelga en sectores considerados servicios esenciales, como salud, transporte y educación.
Además, el Gobierno evalúa mantener sin reglamentar el artículo 94 de la Ley Bases, que habilita despidos en casos de bloqueos o tomas de fábricas, una concesión previa a la CGT.
Quiénes impulsan el proyecto
Los responsables de redactar y negociar la iniciativa son Federico Sturzenegger (Desregulación), Luis Caputo (Economía) y Julio Cordero (Trabajo). El plan oficial es presentar la reforma primero en el Senado, dentro del período de sesiones extraordinarias que irá del 10 al 31 de diciembre.
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, será una de las interlocutoras con el Congreso, mientras el jefe de Gabinete Manuel Adorni y el ministro del Interior Diego Santilli trabajan para sumar apoyos entre los gobernadores y bloques dialoguistas.
La respuesta de la CGT
Desde la central obrera ya anticiparon que no aceptarán reformas que impliquen pérdida de derechos laborales. Cristian Jerónimo, uno de los nuevos líderes, aseguró que están dispuestos a dialogar "con criterios razonables", pero marcó límites claros: rechazan el tope a las indemnizaciones, los bancos de horas y el salario por productividad.
Por su parte, Jorge Sola advirtió que la CGT no acompañará ningún proyecto que replique el DNU 70/23, declarado inconstitucional. "Hay un sector del Gobierno que busca atomizar al sindicalismo, tratándonos como adversarios políticos", señaló.