A pesar del apoyo generalizado al Pacto de Mayo anunciado por el presidente, los gobernadores dialoguistas están contemplando la posibilidad de imponer ciertas condiciones respecto a la ley ómnibus y el paquete fiscal. Esta legislación generó inquietud entre los mandatarios provinciales, quienes ven en la propuesta del Ejecutivo una marcha atrás en temas que consideraban previamente resueltos.

El primer encuentro entre los gobernadores y representantes del Gobierno nacional será crucial para evaluar el impacto de la convocatoria al diálogo realizada por el Presidente. Aunque inicialmente bien recibida, la idea de llegar a un preacuerdo generó tensiones entre las partes.

Si bien los diez gobernadores de Juntos por el Cambio mostraron un frente unido tras el discurso de Milei, algunas diferencias comenzaron a surgir entre ellos en los días posteriores. Mientras algunos expresan su disposición a respaldar el Pacto de Mayo, otros subrayaron la importancia de defender los intereses específicos de sus provincias.

En este contexto, se destaca la postura de gobernadores como Martín Llaryora de Córdoba, Maximiliano Pullaro de Santa Fe y Ignacio Torres de Chubut, quienes enfatizaron en la necesidad de un diálogo inclusivo y manifestaron su preocupación por aspectos específicos de las propuestas gubernamentales. 

Aunque, la mayoría de los gobernadores coinciden en rechazar un aumento de retenciones y muestran malestar por los recortes a las jubilaciones, otros gobernadores dialoguistas también podrían sumarse a esta postura de aceptar la convocatoria de Milei, pero no a cualquier precio.