Francos habló sobre el escándalo de Cúneo Libarona y Tim Ballard
El ministro de Justicia fue grabado en Nueva York ofreciéndole ayuda al exagente de la CIA, acusado de abuso sexual, para mejorar su reputación en el país y facilitarle vínculos con empresarios.
Una cámara oculta revelada por el programa Argenzuela mostró al ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, en una reunión privada con Tim Ballard, exagente de la CIA y figura central de la película Sonido de Libertad. Ballard enfrenta denuncias por abuso sexual dentro de su propia organización.
En el video, grabado en el departamento del exespía en Nueva York, Cúneo Libarona le ofrece ayuda para "cambiar ese malentendido" sobre su figura en Argentina. "Yo te consigo medios, puedo hablar con Rolando porque soy amigo, y decirle que vamos a ponernos en campaña para que venga Tim y armemos algo lindo", se lo escucha decir.
El objetivo: mejorar su imagen pública en el país y facilitar el camino para concretar negocios con empresarios argentinos.
Guillermo Francos, entre el desconocimiento y la contradicción
Tras la difusión del material, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, fue consultado por la prensa en su ingreso a Casa Rosada. Al ser interrogado por el periodista Fabián Waldman sobre si había visto el video, respondió: "No, no vi el video".
Sin embargo, acto seguido intentó justificar la conversación: "No creo que le ofrezca sus servicios, creo que conversó sobre un tema preocupante". Y cerró con una frase que dejó en evidencia su conocimiento del contenido: "No tengo nada que reprocharle".
Piden juicio político contra Cúneo Libarona
El escándalo no tardó en generar reacciones. El funcionario Esteban Paulón, dirigente LGBTI+ y referente en derechos humanos, pidió el juicio político contra el ministro de Justicia por considerar que actuó fuera de sus funciones y con claros intereses particulares.
La controversia pone en el centro del debate la relación entre el Gobierno y figuras internacionales con antecedentes polémicos, y vuelve a abrir interrogantes sobre los límites éticos del lobby político y mediático en la gestión pública.