El Tesoro compró US$500 millones en plena tensión cambiaria
La operación, confirmada por Economía, se dio en medio de la presión sobre el dólar y busca absorber pesos tras el desarme de deuda en bancos.
En un contexto marcado por la tensión cambiaria y la escalada del dólar, el Tesoro Nacional concretó una nueva compra directa de divisas por US$500 millones. La maniobra, confirmada por el Ministerio de Economía, impactó de forma directa en las reservas brutas del Banco Central (BCRA), que pasaron de US$39.060 millones a US$39.551 millones.
Es la segunda operación de este tipo en julio, luego de la registrada el 3 de este mes. La compra se dio días antes de que el Gobierno deba afrontar un pago por US$4200 millones a bonistas.
Dólar volátil y presión monetaria: el contexto de la operación
El inicio de semana mostró una fuerte suba en el tipo de cambio oficial, que llegó a rozar los $1300 al mediodía del lunes. Aunque luego bajó, este miércoles cerró a $1275, con una suba acumulada de $60 en lo que va del mes.
Desde la autoridad monetaria, el director Federico Furiase explicó que la operación permitió absorber pesos y acumular reservas con fondos que el Tesoro ya tenía depositados en el BCRA.
En paralelo, el Gobierno intensificó su estrategia para contener la emisión de pesos, especialmente tras el desarme de las Letras Fiscales de Liquidez (Lefi), que liberó cerca de $5 billones al sistema financiero y generó una fuerte caída en las tasas en pesos.
Subasta de deuda, intervención del BCRA y control de excedentes
Frente a este escenario, el Banco Central intervino en distintas operaciones para evitar que ese excedente de pesos derive en más presión sobre el dólar y los precios. Este miércoles, captó $4,7 billones en una licitación extraordinaria de deuda, impulsada a pedido de los propios bancos.
Según explicó el ministro de Economía, Luis Caputo, las entidades optaron por dejar parte de esos fondos como encaje en el BCRA, lo que derivó en una baja de tasas en plazos cortos. La licitación adicional buscó canalizar esa liquidez hacia instrumentos del Tesoro y, en paralelo, evitar desbalances.
Como la liquidación de esa deuda será recién el viernes, el BCRA salió a absorber pesos por su cuenta, tomando dinero del sistema financiero a una tasa del 36%. Además, intervino tanto en el mercado secundario de letras como en el de dólar futuro.
Desde el equipo económico sostienen que el foco no está en fijar el precio del dólar ni en establecer tasas, sino en mantener el equilibrio monetario y evitar un nuevo brote inflacionario impulsado por un exceso de pesos en circulación.