La Oficina del Presidente publicó este domingo un mensaje oficial sobre los incidentes que ocurrieron en Bolivia el miércoles pasado. Siguiendo la línea de Cancillería, el comunicado afirma que hubo una "falsa denuncia de golpe de Estado".

"Gracias a los reportes de inteligencia, el Gobierno nacional mantuvo la calma y la serenidad frente a los hechos denunciados. El relato difundido era poco creíble y los argumentos no encajaban con el contexto socio-político del país latinoamericano", explica el escrito.

Anteriormente, el comunicado de Cancillería ya había evitado usar el término "golpe de Estado" para describir lo que estaba pasando en Bolivia. En su lugar, usó "movilizaciones irregulares de algunas unidades del Ejército".

"El partido político gobernante controla el Poder Legislativo, el Poder Judicial, el Poder Ejecutivo y las Fuerzas Armadas. Hace tiempo que la democracia boliviana está en peligro. No por un golpe militar, sino porque históricamente los gobiernos socialistas derivan en dictaduras. Sobran ejemplos: Cuba, Venezuela, Nicaragua, Corea del Norte", continúa el mensaje de la Oficina.

Además, el Gobierno denunció que Bolivia tiene "más de 200 presos políticos", entre los que mencionó a "la expresidente interina, Jeanine Áñez Chávez" y al gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho Vaca. "La República Argentina espera que prevalezca la democracia que hace años está siendo atacada en el Estado Plurinacional de Bolivia, e insta a las fuerzas políticas de ese país a garantizar el Estado de Derecho en su territorio", concluyó.