Diputados avanzan con un proyecto para limitar los DNU y generar mayor control legislativo
La oposición puso en marcha la iniciativa que busca reducir el uso discrecional de los decretos presidenciales; la ley cambiaría el sistema actual y permitiría anular un DNU con el rechazo de una sola cámara.
Ofensiva opositora contra el uso de DNU
Los bloques opositores de la Cámara de Diputados dieron un nuevo paso para restringir los decretos de necesidad y urgencia (DNU) del Poder Ejecutivo. Tras la media sanción del Senado, este martes las comisiones de Asuntos Constitucionales y Peticiones, Poderes y Reglamento comenzaron a tratar las modificaciones, con la firma del dictamen prevista para el martes 30 de septiembre.
La iniciativa busca poner límites al uso discrecional de los DNU, herramienta que según los opositores ha sido utilizada en exceso por el Gobierno actual. La ley vigente permite que un decreto siga vigente si una sola cámara lo aprueba, mientras que se necesita el rechazo de ambas para anularlo, situación que prácticamente nunca ocurre.
Cambios que propone la nueva ley
El proyecto introduce medidas clave para reforzar el control legislativo:
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Rechazo con una sola cámara: bastaría con que una cámara diga "no" para que el DNU pierda validez.
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Plazo de 90 días: todo decreto necesita convalidación en ese período, caso contrario queda sin efecto.
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Prohibición de repetir el tema: si un DNU es rechazado, no se podrá dictar otro sobre la misma materia durante ese año parlamentario.
Según la diputada Mónica Litza, del Frente de Todos, el actual uso de DNU se ha convertido en regla, cuando originalmente eran una herramienta excepcional. Por su parte, el diputado del PTS Christian Castillo los calificó como "atributos bonapartistas" que reducen al Congreso prácticamente a la nada.
Críticas cruzadas entre bloques
La diputada del PRO Patricia Vásquez cuestionó la postura del kirchnerismo por ahora querer limitar los DNU, cuando años atrás los defendieron. Mientras tanto, Silvia Lospennato destacó que el PRO siempre sostuvo que la ley vigente era anticonstitucional y anunció su apoyo al proyecto, destacando la necesidad de coherencia institucional más allá de intereses partidarios.
El debate refleja la tensión entre limitar el poder presidencial y garantizar la estabilidad de la acción del Ejecutivo, un tema que promete mantenerse en el centro de la discusión política en las próximas semanas.