Después de más de ocho horas de debate en la Cámara de Diputados, la oposición impulsada por Unión por la Patria, aprobó este miércoles una ley que establece un aumento del 7,2% para los haberes jubilatorios y eleva el bono previsional a $110.000.

El Gobierno de Javier Milei anticipó que vetará la norma, alegando que su implementación comprometería la estabilidad fiscal y los objetivos de equilibrio presupuestario.

Qué establece la nueva ley de aumento jubilatorio

El proyecto aprobado contempla un incremento excepcional y de emergencia para jubilados y pensionados, en el marco de la fuerte pérdida de poder adquisitivo que enfrentan tras los ajustes inflacionarios y la nueva fórmula previsional decretada por el Ejecutivo.

Los puntos centrales de la ley son:

Aumento del 7,2% en los haberes jubilatorios como corrección de arrastre.

Bono mensual de $110.000 para quienes cobran la jubilación mínima.

Aplicación inmediata a partir del mes siguiente a su promulgación.

Financiamiento con reasignaciones presupuestarias y excedentes fiscales.

Un debate tenso con final anticipado: Milei vetará la ley

El tratamiento del proyecto generó fuertes cruces entre el oficialismo y la oposición. Los libertarios, encabezados por el presidente de la Cámara, Martín Menem, rechazaron el proyecto por su supuesto impacto negativo en las cuentas públicas. "Esto dinamita el equilibrio fiscal y retrocede el esfuerzo realizado en seis meses", afirmaron desde La Libertad Avanza.

Desde el oficialismo, ya se adelantó que el presidente Javier Milei vetará la ley, una herramienta constitucional que prevé el rechazo total o parcial de normas aprobadas por el Congreso. "Es una irresponsabilidad que condena al país a volver al déficit eterno", señalaron fuentes del Ejecutivo.

La oposición justifica la medida: "Una reparación urgente"

Desde Unión por la Patria y los bloques dialoguistas como Hacemos Coalición Federal y la UCR, defendieron la ley como un acto de justicia social frente al deterioro del ingreso de los jubilados. "No es un gasto, es una reparación urgente. Nuestros adultos mayores no pueden esperar más", señaló Germán Martínez, jefe de bancada de UP.

El radicalismo también respaldó la norma, aunque pidió en paralelo una discusión integral del sistema previsional. "Hay que evitar parches permanentes, pero hoy los jubilados no pueden seguir perdiendo", sostuvo Rodrigo De Loredo.

Protestas en el Congreso y una jornada cargada de reclamos sociales

Mientras se debatía en el recinto, en las inmediaciones del Congreso se desarrollaron diversas manifestaciones que confluyeron con la tradicional marcha de jubilados. Entre los reclamos destacaron:

Protesta de trabajadores del Hospital Garrahan, en defensa del presupuesto y condiciones laborales.

Movilización por los 10 años del movimiento Ni Una Menos, con demandas contra la violencia de género.

Organizaciones sociales que exigieron mejoras para los sectores más vulnerables.

La escena contrastó con el debate parlamentario, donde se discutía una ley con fuerte contenido social, pero con una advertencia clara desde el Ejecutivo: el ajuste fiscal no se negocia, y las jubilaciones no recibirán aumentos por ley si no son "compatibles con el equilibrio macroeconómico".