El Tribunal Oral Federal 2 recibió 702 correos electrónicos de personas que pedían autorización para visitar a Cristina Fernández de Kirchner, quien cumple prisión domiciliaria por la causa "Vialidad". Los mensajes comenzaron a llegar luego de que el abogado Gregorio Dalbón publicara en la red social X la dirección oficial de correo del tribunal, invitando a los ciudadanos a solicitar el ingreso al domicilio de la ex presidenta.

En su posteo, Dalbón expresó su malestar por las condiciones impuestas a CFK: "Tenés que escribirle a los jueces y esperar que te autoricen. Como si fuera una reclusa peligrosa". Desde Tribunales aseguran, en off, que esta maniobra generó un intento de entorpecer el trabajo judicial.

Los jueces aclaran: solo Cristina puede autorizar visitas

Ante la oleada de correos, los jueces Jorge Gorini y Rodrigo Giménez Uriburu recordaron que el único procedimiento válido para autorizar visitas es que Cristina Kirchner solicite la autorización indicando el nombre de cada persona. Por ello, decidieron no responder ninguno de los mails recibidos y derivaron toda la información a sus abogados, Alberto Beraldi y Ary Llernovoy.

El tribunal ya había rechazado días atrás el pedido de la defensa para permitir visitas sin autorización previa, decisión que también fue apelada por los abogados ante la Cámara de Casación Penal.

El debate por el régimen de visitas y el rol de Casación

Cuando el TOF2 otorgó la prisión domiciliaria en el departamento de calle San José 1.111, en el barrio de Monserrat, impuso restricciones de seguridad. Solo familiares, abogados, custodios y médicos -previamente incluidos en un listado reservado- pueden ingresar sin permiso judicial. El resto necesita una autorización expresa solicitada por la propia ex mandataria.

La defensa de CFK sostiene que no corresponde limitar visitas más allá de la privación de libertad: "La normativa vigente no faculta a los jueces a imponer reglas de conducta adicionales", alegaron.

Aunque el tribunal rechazó la reconsideración por ser presentada fuera de término, sí habilitó la apelación, por lo que el régimen de visitas será analizado por la Sala IV de la Cámara Federal de Casación Penal, integrada por Gustavo Hornos, Mariano Borinsky y Diego Barroetaveña.