Las transferencias a las provincias suben 6% pero aún siguen 12% abajo en relación al 2023
En julio, las transferencias automáticas subieron un 6% interanual real, aunque aún no alcanzan los niveles del año pasado. Las no automáticas también mostraron una leve recuperación.
Las transferencias automáticas de la Nación crecieron un 6% interanual en términos reales. Sin embargo, este repunte aún no compensa la fuerte caída registrada durante los primeros meses del año. En el acumulado de 2025, estas transferencias continúan 12% por debajo en comparación con 2023, a valores constantes.
Los datos surgen del último informe del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), que analiza el flujo de fondos enviados por el Gobierno Nacional a los distritos. La mejora registrada se debe principalmente a la evolución de la recaudación del IVA, que se mantuvo firme en un contexto de caída generalizada del consumo.
También mejoran las no automáticas, pero con disparidad
Las transferencias no automáticas -también llamadas "discrecionales"- mostraron en julio una suba real del 17% interanual. Esta mejora responde, en parte, a giros puntuales como los que se destinan al Fondo Nacional de Incentivo Docente (FONID) y programas sociales, aunque no todas las provincias recibieron montos similares.
De todos modos, en lo que va del año, este tipo de envíos acumula una caída real del 78% frente al mismo período del año pasado. La disparidad en la distribución y la fuerte reducción en programas como el FONID o el Fondo de Fortalecimiento Fiscal del Conurbano generaron tensiones entre los gobernadores y la Casa Rosada.
El ajuste fiscal sigue pesando en las cuentas provinciales
A pesar del leve repunte, las provincias siguen afectadas por el ajuste implementado desde principios de año. La caída de ingresos, sumada a la recesión económica y a la paralización de obras públicas, complica la situación fiscal de los distritos, especialmente aquellos más dependientes de los giros nacionales.
Mientras tanto, los gobernadores siguen reclamando mayor previsibilidad en los fondos y una mesa de diálogo con el ministro de Economía, Luis Caputo, para discutir cómo sostener la administración diaria sin comprometer servicios básicos como salud y educación.