Martín Menem impulsa una reforma en la AGN y propone más poder para Diputados
El presidente de la Cámara Baja presentó un proyecto que modifica el equilibrio entre Diputados y el Senado en la Auditoría General de la Nación, en medio de la parálisis del organismo.
Martín Menem, titular de la Cámara de Diputados, presentó un proyecto de ley para reformar el funcionamiento de la Auditoría General de la Nación (AGN). La iniciativa propone que la Cámara Baja pase a designar a cuatro auditores auxiliares -incluyendo uno por el oficialismo-, mientras que el Senado solo designaría dos. Este cambio podría provocar tensiones con la Cámara Alta, ya que actualmente ambas cámaras nombran a tres auditores cada una.
La propuesta busca reactivar a la AGN, actualmente paralizada por la falta de consensos políticos para reemplazar a los seis auditores cuyo mandato ya venció. Hoy, el organismo solo está funcionando bajo la conducción de su presidente, Juan Manuel Olmos. En medio de esta disputa, también trascendió que sectores de la oposición impulsan la designación de representantes de Unión por la Patria y Encuentro Federal, lo que refleja la puja interna en Diputados.
Cambios en la estructura de la AGN y nuevas funciones de control
Entre los puntos más destacados del proyecto, se incluye la posibilidad de firmar acuerdos para auditar nuevas áreas del Estado como universidades, el Arca y el Poder Judicial. También redefine el rol del presidente de la AGN, quien sería nombrado por el titular del Senado a propuesta del bloque con mayor representación, y fija mecanismos de remoción con mayoría calificada.
Los auditores tendrían un mandato de cuatro años, con posibilidad de reelección solo una vez, y sus sueldos estarían equiparados a los de legisladores nacionales. En tanto, el auditor general cobraría lo mismo que un senador.
Menem, junto a otros diputados de La Libertad Avanza como Gabriel Bornoroni, Nicolás Mayoraz, Bertie Benegas Lynch, Nadia Márquez y Santiago Santurio, sostiene que esta reforma da mayor transparencia al proceso de control estatal y fortalece la autonomía funcional del organismo, tal como lo establece el artículo 85 de la Constitución Nacional.
El oficialismo apunta a controlar la parálisis institucional
El proyecto no solo redefine el reparto de poder entre Diputados y el Senado, sino que también introduce el concepto de control institucional desde la oposición, al dejar en manos de las mayorías parlamentarias de Diputados la designación de los auditores.
"La responsabilidad fiscal bien administrada y controlada por el sistema representativo es el pilar de la república democrática", concluye el texto, que promete abrir una nueva etapa en el funcionamiento de la AGN, si logra superar las resistencias políticas que ya se avizoran en el Senado.