En una tensa sesión en la Cámara de Diputados, el oficialismo logró sostener el veto del presidente Javier Milei a la Ley de Financiamiento Universitario, con el apoyo del PRO, la UCR y la abstención de algunos bloques provinciales. 

La votación, que permitió a La Libertad Avanza blindar el decreto, desató críticas de la oposición, que acusó a los legisladores de dar la espalda a la sociedad.

El senador y presidente de la UCR, Martín Lousteau, afirmó que la Cámara de Diputados actuó en complicidad con el Gobierno y algunos legisladores opositores. "La sociedad se ha manifestado a favor de la educación pública universitaria, y el oficialismo ha decidido ignorar esa voz", sostuvo. Lousteau también enfatizó la necesidad de proteger lo que funciona bien, reiterando el compromiso de la UCR con la educación pública.

Por su parte, la diputada de Unión por la Patria, Mónica Macha, advirtió que el veto no solo afecta a las universidades, sino que representa una "privatización indirecta" de la educación. Leandro Santoro, también de UxP, destacó el silencio del oficialismo tras la votación, calificándolo de "vergonzoso".

Desde el Frente de Izquierda, Nicolás del Caño denunció que el triunfo del Gobierno es pírrico y llamó a movilizarse en defensa de las universidades públicas. En contraste, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, celebró el respaldo al veto como un paso hacia una universidad "libre" y criticó el uso partidista de las instituciones educativas.

El diputado José Luis Espert, de La Libertad Avanza, defendió la postura del oficialismo, asegurando que la universidad pública no está en peligro, sino los intereses de la "vieja política". Su compañera de bloque, Carolina Píparo, también reiteró que la educación seguirá siendo pública y gratuita, instando a trabajar para que recupere su papel igualador en la sociedad.