Con el final del período de sesiones ordinarias marcado para mañana, el Gobierno de Javier Milei aún no ha cerrado el temario para las sesiones extraordinarias que se celebrarán en diciembre. A pesar de que la convocatoria podría realizarse en cualquier momento entre este mes y los primeros días de 2024, en la Casa Rosada se toman su tiempo para evaluar los proyectos y la viabilidad de cada uno, sin haber iniciado conversaciones formales con los distintos bloques del Congreso.

La falta de consenso en la oposición y la presión interna para definir las iniciativas a tratar generan incertidumbre sobre lo que realmente se discutirá en el Congreso durante el verano. Algunos proyectos clave, como la reforma electoral, la privatización de Aerolíneas Argentinas y los pliegos judiciales, están en evaluación, pero las diferencias entre las fuerzas políticas podrían complicar el panorama.

Proyectos en danza: reformar la ley electoral y privatizar Aerolíneas

Uno de los temas que más divide a los bloques es la propuesta de eliminar las PASO (Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias). Si bien esta reforma tiene apoyo dentro del oficialismo, genera rechazo en sectores clave de la oposición, como el PRO, que en cambio apoya la privatización de Aerolíneas Argentinas. Este proyecto, que es respaldado por la oposición, se enfrenta a la negativa del kirchnerismo, que sigue firme en su postura de mantener la aerolínea de bandera bajo control estatal.

La falta de alineación entre las partes ha llevado a los asesores de Milei a evaluar las posibilidades de avanzar con una u otra propuesta, según las afinidades de los bloques. De esta manera, el resultado de las negociaciones internas en la Casa Rosada determinará qué iniciativas finalmente formarán parte de la agenda de las extraordinarias.

La Corte Suprema y la "Ficha Limpia": puntos conflictivos en la agenda

Otro tema candente es la designación de nuevos jueces para la Corte Suprema de Justicia. El PRO y el kirchnerismo tienen diferencias profundas sobre los candidatos, lo que podría complicar su tratamiento en el Congreso. El rechazo de algunos sectores a los pliegos propuestos por el Gobierno podría dilatar la aprobación de estos nombramientos.

Por otro lado, la versión libertaria de la Ley de Ficha Limpia, anunciada recientemente por el vocero presidencial Manuel Adorni, aún está en una etapa incipiente y genera incomodidad dentro del propio oficialismo. Aunque algunos asesores cercanos a Milei, como Santiago Caputo, se oponen a avanzar con este proyecto, el presidente parece decidido a impulsar su discusión. No obstante, esta medida aún está lejos de ser una prioridad en la agenda oficialista.

La incertidumbre sobre el presupuesto y las misceláneas

Un aspecto que aún está en el aire es el tratamiento del presupuesto para 2025, que no ha sido acordado con la oposición. Desde el Gobierno se asegura que no están dispuestos a negociar modificaciones que pudieran generar un desequilibrio fiscal, aunque no cierran la puerta a incluirlo más adelante. Por otro lado, el Gobierno también evalúa incluir en la convocatoria temas "misceláneos", como el juicio por jurados o el juicio en ausencia, que no son prioritarios pero siguen pendientes.

Mientras tanto, la impaciencia crece en algunos sectores de la oposición, como el PRO de Cristian Ritondo y Encuentro Federal de Miguel Pichetto, quienes aún no han sido llamados a dialogar sobre el temario. Aunque algunos asesores del oficialismo afirman que las conversaciones se están llevando a cabo de manera informal, aún no se ha alcanzado un consenso claro sobre los proyectos que finalmente se impulsarán en las extraordinarias.