Ecuador volvió a ser escenario de una tragedia carcelaria. El Servicio Nacional de Atención a Personas Privadas de la Libertad (SNAI) confirmó que 27 presos murieron por asfixia durante la tarde del domingo en el Centro de Privación de Libertad de Machala, ubicado en la provincia costera de El Oro, al sur del país.

Según el comunicado oficial, las víctimas fallecieron "por suspensión", una descripción médica que alude a una muerte inmediata por falta de oxígeno. Las autoridades investigan las circunstancias del suceso, ocurrido en medio de nuevos disturbios dentro del penal.

Violencia continua y cifra total de víctimas

El episodio se registró apenas unas horas después de otros enfrentamientos durante la madrugada, que habían dejado cuatro reclusos asesinados y 34 heridos, entre ellos un agente policial.

Con estos nuevos hechos, el número total de fallecidos asciende a 31 internos, marcando una de las jornadas más violentas del año dentro del sistema penitenciario ecuatoriano.

El SNAI informó que la situación fue controlada tras un operativo conjunto entre la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas, aunque persiste la tensión entre los pabellones.

Reubicaciones y un trasfondo de conflicto

De acuerdo con las autoridades, los disturbios comenzaron luego de que se notificara a varios presos su traslado a una nueva cárcel de máxima seguridad que el Gobierno está construyendo en la provincia de Santa Elena, próxima a inaugurarse.

La medida forma parte del plan oficial para descomprimir los penales más conflictivos del país, donde los enfrentamientos entre bandas criminales han dejado cientos de muertos en los últimos años.