El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, anunció este lunes su renuncia como líder del Partido Liberal, decisión que en la práctica implica su salida del poder luego de diez años de gobierno. Trudeau continuará como primer ministro hasta que el Partido Liberal elija a su sucesor.

El mandatario, quien enfrenta una creciente impopularidad debido al aumento del costo de vida y la crisis de vivienda, ha guardado silencio en las últimas semanas. Su situación se agravó tras la inesperada renuncia de la ministra de Finanzas el pasado 16 de diciembre.

"Su prolongado silencio tras este drama político dice mucho sobre la debilidad de su posición actual", comentó Daniel Béland, profesor de ciencias políticas en la Universidad McGill.

Trudeau, que asumió el cargo en 2015, se destacó por sus políticas progresistas y su enfoque en temas clave como el cambio climático y la reconciliación con los pueblos indígenas.

Prorrogan el Parlamento hasta marzo

El Parlamento canadiense permanecerá inactivo hasta el 24 de marzo, una medida que permitirá al Partido Liberal evitar una moción de censura mientras se elige al nuevo líder.

Según informó la cadena pública CBC, la gobernadora general, Mary Simon, aceptó la prorrogación tras reunirse con Trudeau en la mañana del lunes. Esta estrategia, aunque controvertida, ya había sido utilizada en 2020 y 2008 para evitar crisis políticas.

La sesión parlamentaria estaba programada para reanudarse el 27 de enero, pero con la mayoría opositora planeando presentar una moción de censura, esta prórroga ofrece tiempo a los liberales para reorganizarse y definir su futuro.

Un contexto político desafiante

Canadá atraviesa un momento de alta tensión política. La salida de Trudeau y la suspensión de actividades parlamentarias evidencian las dificultades que enfrenta el Partido Liberal para conservar el poder en medio del descontento popular.

La elección del próximo líder será determinante para la estabilidad y el rumbo político del país.