Vladimir Putin afirmó que Rusia no busca un conflicto con Europa, pero advirtió que está preparada para responder si los países europeos deciden avanzar hacia una confrontación. La declaración llegó horas antes de un encuentro previsto en Moscú con enviados de Estados Unidos para discutir posibles avances diplomáticos en la guerra en Ucrania.

Críticas directas al rol de Europa en las negociaciones

Putin acusó a varios gobiernos europeos, como los de Francia, Alemania y el Reino Unido, de presentar demandas que considera inadmisibles dentro de un eventual acuerdo de paz. Según el mandatario ruso, estas posturas buscan frenar las conversaciones y responsabilizar a Moscú por la falta de avances.

Para el Kremlin, estas condiciones muestran que Europa está más inclinada a sostener el conflicto que a promover una salida negociada.

Rusia afirma estar preparada para cualquier escenario

El mensaje de Putin fue claro: si Europa decide escalar, Rusia responderá. Aunque aseguró que no desea un conflicto abierto con el continente, insistió en que el país tiene la capacidad militar y política para enfrentar cualquier agresión.

La advertencia ocurre en un contexto de intensas gestiones diplomáticas y con Estados Unidos intentando reactivar negociaciones que permitan acercar posiciones entre Kiev y Moscú.

Impacto internacional y riesgos de escalada

Las declaraciones aumentan la tensión en un momento sensible, con Europa reforzando su apoyo a Ucrania y Rusia endureciendo su discurso. También complican el panorama para los enviados estadounidenses que buscan promover un marco de negociación.

Para la comunidad internacional, la advertencia de Putin reaviva el temor a una escalada que pueda expandir el conflicto más allá de Ucrania y tensar aún más la seguridad regional.