El senador colombiano Miguel Uribe Turbay, uno de los principales referentes de la oposición y aspirante a la presidencia en 2026, fue víctima de un atentado armado este sábado mientras participaba de un acto proselitista en Bogotá. El dirigente, de 39 años, recibió al menos tres disparos, dos de ellos en la cabeza, y fue trasladado de urgencia a la clínica Fundación Santa Fe, donde fue sometido a una compleja intervención quirúrgica.

Según informó el alcalde Carlos Fernando Galán, Uribe superó con éxito una primera cirugía y atraviesa ahora "horas críticas" para su recuperación. Su esposa, María Claudia Tarazona, expresó: "Miguel salió de la cirugía, lo logró. Ahora un gran esfuerzo en su recuperación".

Cómo fue el ataque y qué se sabe hasta ahora

El atentado ocurrió en un barrio popular del oeste de Bogotá. Uribe se encontraba dando un discurso cuando fue interceptado por dos atacantes en moto. Uno de ellos, según testigos, se bajó del vehículo y le disparó a quemarropa.

Videos difundidos en redes sociales muestran el momento del ataque y las imágenes posteriores, donde se ve al senador herido, cubierto de sangre, sostenido por colaboradores. Fue trasladado en ambulancia y los médicos confirmaron que se le practicaron procedimientos neuroquirúrgicos y vasculares debido a las heridas.

El presunto agresor, un menor de 15 años, fue reducido por los escoltas de Uribe y quedó detenido con una herida en una pierna. Otros dos asistentes al acto resultaron heridos en el intercambio de disparos. Por ahora, se desconocen los motivos del ataque.

Un referente de la derecha y una figura en ascenso

Miguel Uribe es senador desde 2022 por el partido Centro Democrático, que lidera el expresidente Álvaro Uribe. Anteriormente fue secretario de Gobierno de Bogotá y concejal, y en 2019 compitió sin éxito por la alcaldía de la capital. En octubre pasado anunció su intención de postularse a la presidencia en 2026, como fuerte crítico de Gustavo Petro.

Es hijo de la periodista Diana Turbay -asesinada en un operativo de rescate tras ser secuestrada por Pablo Escobar- y nieto del expresidente Julio César Turbay Ayala.

Desde distintos sectores, tanto en Colombia como en el exterior, se alzaron voces de condena al atentado. El expresidente argentino Mauricio Macri pidió que el presidente Petro garantice una investigación seria: "Muy impactado por el atentado criminal contra Miguel Uribe, que amenaza a la democracia colombiana", escribió en redes sociales.