Lula fue diagnosticado con laberintitis y canceló parte de su agenda oficial
El presidente brasileño, de 79 años, sufrió un episodio de vértigo que lo obligó a realizarse estudios médicos en Brasilia. Le recomendaron reposo y su salud genera preocupación.
Luiz Inácio Lula da Silva, presidente de Brasil, fue diagnosticado con laberintitis luego de experimentar un cuadro de vértigo. El episodio lo obligó a someterse a estudios médicos en el Hospital Sirio-Libanés, en Brasilia, y a suspender parte de su agenda oficial. Según el parte médico, los exámenes de sangre e imagen dieron resultados normales, pero se le indicó reposo durante todo el día.
"El presidente fue sometido a exámenes médicos después de manifestar vértigos y ya se encuentra en la residencia oficial, en reposo", informó el gobierno. El diagnóstico de laberintitis, una inflamación del oído interno que puede causar vértigos y pérdida de equilibrio, no reviste gravedad, pero sí puede ser incapacitante, sobre todo en adultos mayores.
Los antecedentes médicos que marcan su tercer mandato
Desde su regreso al poder en enero de 2023, Lula atravesó varias complicaciones de salud. En diciembre del año pasado fue operado de urgencia por un hematoma intracraneano producto de una caída. Además, en 2023 fue intervenido quirúrgicamente por una artrosis en la cadera, y en 2011 enfrentó un cáncer de laringe.
Pese a estos antecedentes, Lula mantuvo una agenda intensa, con viajes oficiales y encuentros diplomáticos en países como Japón, China y Rusia. Sin embargo, estos episodios recientes alimentan las dudas sobre una posible candidatura presidencial en 2026. "Solo seré candidato si estoy bien de salud y con energía para gobernar", declaró en diciembre pasado.
Actualmente, su imagen pública atraviesa una meseta: según una encuesta de Datafolha de marzo, cuenta con un 35% de aprobación y un 33% de desaprobación.