Joël Le Scouarnec, un excirujano de 74 años, está siendo juzgado en Francia por abusar de 299 pacientes, en su mayoría niñas y adolescentes. Durante el juicio, el acusado admitió haber cometido parte de los delitos, incluyendo el abuso de su propia nieta de seis años. "Soy un perverso", confesó ante el tribunal penal de Vannes, donde enfrenta cargos por violación y agresión sexual.

A pesar de una condena en 2020 por abusar de cuatro menores, las revelaciones actuales sacan a la luz un historial de crímenes sistemáticos que se extendieron por décadas. Los fiscales lo acusan de utilizar su posición como médico para acceder y abusar de pacientes, muchos de ellos bajo anestesia.

Los diarios que destaparon el horror

El caso explotó en 2017, cuando una vecina de seis años lo denunció. Al allanar su casa, las autoridades encontraron diarios personales en los que detallaba de forma minuciosa los abusos cometidos a lo largo de su carrera. Los escritos incluían nombres de víctimas y descripciones precisas de los hechos.

En esos registros también se hallaron más de 30.000 imágenes y videos con contenido pedófilo, escenas de extrema violencia y actos sexuales con objetos. Los investigadores confirmaron que los abusos ocurrieron en al menos diez hospitales entre 1989 y 2014.

Críticas al sistema por encubrir los abusos

El escándalo generó fuertes cuestionamientos hacia las autoridades sanitarias. A pesar de una condena en 2005 por posesión de material pedófilo, Le Scouarnec siguió ejerciendo como cirujano.

Organizaciones como La Voix de l'Enfant calificaron la inacción del Colegio de Médicos como "un fracaso colectivo". Una de las víctimas cuestionó: "¿Cuántas personas sabían que era un pedófilo y le permitieron trabajar con niños?".

El megajuicio, que se espera que dure varias semanas, podría convertirse en uno de los más grandes de la historia judicial francesa, con decenas de víctimas dando testimonio contra el excirujano.