Durante una conferencia de prensa, Rubio fue consultado de manera directa sobre si la administración republicana busca un cambio de régimen en Venezuela. Lejos de una definición contundente, el funcionario optó por una respuesta ambigua: sostuvo que en el país caribeño "gobierna un régimen ilegítimo" que, según sus palabras, mantiene vínculos con organizaciones terroristas que representan una amenaza para la seguridad de Estados Unidos. 

"El presidente Trump está enfocado en proteger nuestros intereses", afirmó.

El jefe de la diplomacia estadounidense también esquivó pronunciarse sobre una eventual ofensiva militar contra territorio venezolano. En ese sentido, remarcó que hasta el momento no se dio ninguna situación que obligue a pedir autorización al Congreso para avanzar con acciones armadas. 

"No ocurrió nada que nos lleve a solicitar la aprobación del Capitolio", señaló.

En su exposición, Rubio volvió a cargar contra el chavismo y lo vinculó con Irán, Hezbollah y el narcotráfico internacional. Además, aseguró que grupos armados como el ELN colombiano y disidencias de las FARC actúan "sin ocultarse" dentro de Venezuela. "Eso es una amenaza directa a los intereses nacionales de Estados Unidos. Y para nosotros, Maduro no es un presidente legítimo", enfatizó.

Respecto a las restricciones sobre la navegación de buques petroleros, el funcionario advirtió que Washington mantendrá firme la aplicación de sus sanciones. 

"No hay nada que limite nuestra capacidad de hacer cumplir las leyes estadounidenses en relación con embarcaciones sancionadas", sostuvo. 

En esa línea, explicó que la salida reciente de cuatro petroleros venezolanos fue posible porque no estaban alcanzados por sanciones vigentes.

Trump no descarta un conflicto armado con Venezuela

En paralelo, el propio Donald Trump alimentó la tensión. En una entrevista con NBC News difundida este viernes, el presidente estadounidense aseguró que no descarta un escenario de guerra con Venezuela y evitó confirmar si su estrategia final apunta a la caída de Maduro, con quien mantuvo una conversación telefónica en noviembre.

Las declaraciones del mandatario generaron ruido puertas adentro. En Estados Unidos crecen las críticas hacia Trump por priorizar la política exterior mientras persisten problemas internos como el aumento del costo de vida. Además, sectores opositores recuerdan que durante la campaña había prometido mantener al país al margen de conflictos en el extranjero.

Desde el Partido Demócrata también subrayan que cualquier declaración formal de guerra o ataque militar requiere el aval del Congreso, incluso en el caso de operativos contra embarcaciones sospechadas de transportar drogas. La Casa Blanca, por su parte, insiste en que estas acciones están dirigidas contra el narcotráfico y acusa al gobierno venezolano de financiar lo que denomina "terrorismo narco" con ingresos petroleros.

Nuevo ataque de Estados Unidos en el Caribe

En ese contexto, el Comando Sur de Estados Unidos confirmó un nuevo operativo militar en el Caribe. El jueves, fuerzas estadounidenses atacaron dos embarcaciones que, según Washington, eran utilizadas para el tráfico de drogas. El saldo fue de al menos cinco personas muertas y, con este episodio, ya serían 105 las víctimas fatales en acciones de este tipo ordenadas por la Casa Blanca.

La confirmación llegó a través de un comunicado publicado en la red social X, acompañado por un video del bombardeo. 

"Bajo la dirección del secretario de Guerra, Pete Hegseth, la Fuerza de Tarea Conjunta Southern Spear llevó adelante ataques letales contra dos buques operados por organizaciones terroristas designadas en aguas internacionales", informó el Comando Sur.