Israel bombardea sede de TV estatal en Teherán y advierte nuevos ataques en Irán
El Ejército israelí atacó el canal IRIB en el corazón de Teherán y pidió evacuar el Distrito 3.
Las Fuerzas Armadas de Israel lanzaron este lunes un ataque aéreo contra la sede de la televisión pública iraní, IRIB, ubicada en Teherán. La ofensiva fue confirmada por medios iraníes como la agencia semioficial Mehr, que detalló que el bombardeo tuvo como blanco uno de los principales bastiones comunicacionales del régimen persa.
Desde Israel, la Fuerza Aérea informó que continúan los operativos sobre objetivos militares situados en el centro de Irán, aunque no brindaron más precisiones por el momento. La ofensiva ocurre en medio de una creciente tensión bilateral.
Israel apunta contra la "propaganda" iraní
El ministro de Defensa de Israel, Israel Katz, había anticipado que el foco estaría puesto en desarticular los mecanismos propagandísticos iraníes. "El altavoz de propaganda y sedicioso de Irán está a punto de desaparecer", escribió Katz en redes sociales, dejando entrever el objetivo del ataque. Poco después, se confirmó la evacuación de zonas cercanas a la sede televisiva.
En paralelo, voceros del Ejército israelí emitieron una alerta urgente para que los ciudadanos evacúen el Distrito 3 de Teherán, lugar donde se encuentra el canal estatal atacado. El portavoz militar en árabe, Avichay Adraee, instó a abandonar el área de forma inmediata por seguridad.
Más bombardeos cerca de Afganistán
Además del ataque en la capital, Israel también confirmó operaciones en el extremo nororiental de Irán, cerca de la frontera con Afganistán. Aunque no se especificaron los blancos exactos, se informó que se trata de una extensión de los operativos militares que ya se vienen realizando en distintas zonas clave del territorio iraní.
La escalada ocurre poco después de un fuerte contraataque iraní que logró superar la defensa de la 'Cúpula de Hierro' israelí, provocando al menos diez muertos y cientos de heridos. El conflicto sigue en alza y las señales no apuntan a una pronta desescalada.