En un giro decisivo hacia la paz en Medio Oriente, Hamas liberó este lunes a los 20 rehenes que mantenía cautivos desde hace más de dos años en la Franja de Gaza. Entre ellos se encuentran tres ciudadanos argentinos, cuyos nombres fueron confirmados en la lista oficial publicada por el grupo islamista. La liberación forma parte de un histórico acuerdo de paz que contó con la mediación del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

El operativo comenzó en la ciudad de Khan Younis, al sur de Gaza, donde la Cruz Roja Internacional recibió a los primeros 13 rehenes, quienes fueron trasladados bajo estrictas medidas de seguridad y atención médica. Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) ya tienen la custodia de todos los sobrevivientes, que están siendo evaluados por equipos médicos y psicológicos antes de reencontrarse con sus familias.

Horas antes, el presidente Trump aterrizó en Tel Aviv, donde fue recibido por el primer ministro israelí Benjamín Netanyahu. En declaraciones a la prensa, el mandatario estadounidense aseguró que la guerra ha terminado y que Hamas cumplirá con el acuerdo de alto el fuego. "Este es un gran día, un nuevo comienzo", afirmó.

Como parte del pacto, Israel se comprometió a liberar a 1968 prisioneros palestinos, de los cuales 154 serán deportados. Este intercambio representa el mayor gesto de distensión desde el inicio del conflicto, que durante dos años dejó decenas de miles de muertos en Gaza y un país entero en vilo por la suerte de sus ciudadanos secuestrados.

La liberación de los últimos 13 rehenes fue celebrada en todo Israel, especialmente en Tel Aviv, donde miles de personas siguieron los acontecimientos a través de pantallas públicas. Las autoridades israelíes desplegaron un importante operativo logístico para asegurar el traslado, la atención médica y el reencuentro con sus familias.

Mientras tanto, se espera para esta tarde el traslado de los cuerpos de al menos 26 rehenes fallecidos durante el cautiverio. Según informes de medios regionales, Hamas podría enfrentar dificultades para localizar algunos restos, lo que genera incertidumbre entre los familiares.