Durante la noche del domingo, Rusia enfrentó un nuevo ataque con drones en su territorio. Esta vez, la región de Volgogrado fue el objetivo de una ofensiva aérea que, según autoridades locales, buscó impactar en infraestructura de transporte y energía.

Las fuerzas de defensa aérea interceptaron los dispositivos, pero los restos provocaron daños en una línea de alta tensión que dejó sin luz a la ciudad de Ilovlya y a zonas aledañas, informó el gobernador Andrey Bocharov. En paralelo, en Frolovo, uno de los drones no detonados aterrizó sobre vías ferroviarias, forzando la suspensión de trenes y la intervención de equipos antiexplosivos.

Ferrocarriles Rusos reportó que seis trenes, incluidos servicios hacia Moscú y San Petersburgo, sufrieron demoras.

Sochi: incendio en un depósito de combustible

La ciudad de Sochi, uno de los destinos turísticos más importantes de Rusia, también fue escenario de un ataque con drones. En la madrugada del domingo, un artefacto no tripulado impactó en un tanque con productos petrolíferos en el distrito de Adler, generando un incendio de gran magnitud.

Según autoridades locales, el tanque afectado contenía 2.000 metros cúbicos de combustible. Más de 120 personas trabajaron en la zona para contener las llamas. El alcalde Andrei Proshunin confirmó que no hubo víctimas, aunque el daño fue significativo.

Ucrania reivindica los ataques: impacto en Crimea y tensión en aumento

Desde Kiev, el Servicio de Seguridad de Ucrania informó que los ataques formaron parte de una operación contra objetivos militares rusos. En Crimea, drones ucranianos destruyeron un avión Su-30SM, dañaron otro, y afectaron tres aviones Su-24 estacionados en la base aérea de Saky. También se reportó la destrucción de un depósito de armas aéreas.

En relación al ataque en Sochi, el Estado Mayor ucraniano señaló que fue ejecutado por las Fuerzas de Sistemas No Tripulados y que en el aeropuerto operaba una unidad de la aviación militar rusa.

Rusia responde con una ofensiva masiva

En paralelo, Ucrania denunció nuevos ataques rusos. La Fuerza Aérea ucraniana informó que durante la noche anterior interceptaron 161 de los 162 drones lanzados por Moscú, además de un misil hipersónico Kinzhal.

La escalada de ataques cruzados deja en evidencia el aumento de la intensidad del conflicto, con nuevos blancos en territorio ruso y contrainfraestructura estratégica, tanto militar como civil.