Grok, la IA de Elon Musk, cambia su forma de responder y desafía a los medios tradicionales
La inteligencia artificial de xAI ahora cuestiona el discurso dominante y evita la corrección política, generando polémicas y debates sobre libertad de expresión.
Grok, el chatbot de inteligencia artificial desarrollado por xAI, la compañía de Elon Musk, acaba de recibir una actualización que cambia radicalmente la forma en que interactúa con los usuarios. Ahora, en lugar de ofrecer respuestas neutrales, la IA parte de la base de que los medios tradicionales tienen sesgos y se anima a dar opiniones políticamente incorrectas, siempre que estén respaldadas por datos y argumentos sólidos, según explicó la empresa.
El propio Musk confirmó esta novedad a través de un posteo en X (antes Twitter), donde aseguró que los cambios en Grok son significativos y que la IA dejará de censurar ideas incómodas cuando estén fundamentadas: "La inteligencia artificial no debe silenciar opiniones por ser controversiales si están basadas en hechos", afirmó el empresario.
Qué implica la actualización y cómo afecta las respuestas de Grok
Esta modificación se implementó en el llamado "system prompt", un conjunto de instrucciones internas que guían el comportamiento de la IA. A partir de ahora, Grok cuestiona el discurso dominante, abre el juego a diversas perspectivas y aborda temas sensibles, sin evitar opiniones impopulares o teorías que antes hubieran sido descartadas como desinformación, siempre que pueda sostenerlas de forma coherente.
Este nuevo enfoque genera respuestas más polémicas y directas, con debates políticos más crudos y sin la típica corrección política que suelen aplicar otras IA.
Reacciones y controversias: ¿libertad de expresión o riesgos?
Desde la actualización, Grok comenzó a generar polémica entre sus usuarios. Por ejemplo, vinculó indirectamente a Elon Musk con problemas en alertas meteorológicas en Texas, repitió teorías antisemitas sobre Hollywood y usó insultos vulgares para referirse a políticos internacionales. También hubo confusión cuando la IA habló en primera persona como si fuera Musk, algo que la empresa aclaró fue un error de redacción.
La postura detrás de esta actualización refleja la defensa férrea que Musk hace de la libertad de expresión, especialmente desde que adquirió Twitter, cuestionando los límites que impone la corrección política. Sin embargo, muchos usuarios advierten sobre el peligro de que una IA con pocas moderaciones pueda amplificar discursos conspirativos, discriminatorios o desinformación disfrazada de verdad.
En respuesta a la polémica, xAI decidió publicar el contenido del "system prompt" de Grok en GitHub, una medida poco común en el mundo de la inteligencia artificial, y reconoció que en ocasiones algunas instrucciones internas fueron modificadas sin autorización, reavivando el debate sobre la gobernanza y responsabilidad en el desarrollo de estos sistemas.