Una ex Gran Hermano reveló que no puede pagar el alquiler y volvió a trabajar como delivery
La ex participante Katia Fenocchio, conocida como "La Tana", contó que atraviesa una fuerte crisis económica, debe deudas y que su novio la ayuda a cubrir el alquiler mientras intenta generar ingresos como repartidora.
La exposición televisiva no siempre se traduce en estabilidad, y el caso de Katia Fenocchio lo deja en evidencia. La ex Gran Hermano, recordada por su paso por la última edición del reality, confesó que hoy no llega ni a pagar el alquiler y que atraviesa una etapa crítica sin trabajo estable.
En una entrevista con Gastón Trezeguet, Katia fue contundente:
"Estoy desocupada, no están saliendo laburos. Está duro, está difícil. Re complicado, mal".
La joven de La Matanza explicó que, tras el programa, intentó lanzar su propio emprendimiento de ropa e invirtió dinero en un canal de streaming, pero esa apuesta terminó generando deudas:
"Las tarjetas están al rojo vivo. Eso es una inversión, no te da plata al toque".
En ese contexto, reveló que su actual pareja la está ayudando económicamente:
"Si no fuese por mi novio, no sé qué haría. Él me está pagando el alquiler".
Volver al delivery y una deuda inesperada
Ante la falta de ingresos, Katia decidió retomar el delivery en moto, una actividad que ya conocía. Sin embargo, el regreso no fue sencillo:
"A mí no se me caen las uñas. Ayer agarré la moto y me fui a laburar. Hice delivery, pero me fue re mal. Ahora le debo 80 lucas a la aplicación".
Confesó que, por miedo a trabajar sola desde que se volvió conocida, pidió que un amigo la acompañara. Pero incluso ese primer día tuvo complicaciones.
Mientras retiraban un pedido, la mochila cayó al piso y el producto -un sushi- quedó inutilizable. La clienta vio la situación y se negó a recibirlo:
"No me abrió la puerta. No iba a ponerme a discutir porque iba a terminar perdiendo yo, que quedo expuesta".
A pesar de todo, Katia aseguró que seguirá buscándose la vida como pueda para salir adelante, aunque la falta de oportunidades y las deudas la mantienen en un contexto de fuerte vulnerabilidad económica.