Una fuerte polémica rodea la reciente fiesta de cumpleaños de Lamine Yamal, la joven estrella del fútbol español, que celebró sus 18 años con una exclusiva fiesta en una isla europea. Según denunció la modelo e influencer Claudia Calvo en el programa TardeAR de Telecinco, le ofrecieron entre 10.000 y 20.000 euros por cada mujer que pudiera llevar al evento.

"Me contactaron para reunir a 12 chicas. Se fijaban en la talla del pecho y el color del pelo. Todo era muy superficial", relató Calvo, quien aseguró que le ofrecieron una tarjeta con gastos pagos, pasajes, hotel y comidas incluidas. Según explicó, la propuesta fue "una proposición indecente" y decidió rechazarla.

Además, la modelo aseguró que tras hacer públicas sus declaraciones sufrió un intento de hackeo en sus redes sociales: "Estoy segura de que fue alguien del entorno de Lamine Yamal".

Requisitos estrictos y discreción total

Según el programa español, las invitadas recibieron un mensaje con condiciones claras: "Sin teléfonos, sin cámaras, sin drogas. Todo está incluido. La ubicación se revela unas horas antes del evento. La discreción es obligatoria".

En redes sociales, Calvo aclaró que solo relató lo que le informaron a ella y pidió disculpas si se malinterpretaron sus palabras. "Todo es presuntamente, no hay pruebas ni imágenes", sostuvo en una publicación de Instagram.

Críticas por discriminación en el evento

A la polémica se sumó una denuncia pública de la Asociación de Personas con Acondroplasia y Otras Displasias Esqueléticas con Enanismo (ADEE), que repudió la contratación de personas con enanismo como parte del entretenimiento de la fiesta. "Actuaremos por la vía legal y social", advirtieron en un comunicado publicado en X (ex Twitter).

El evento contó con unos 200 invitados, incluidos artistas como Bizarrap, Duki, Bad Gyal y Ozuna, y fue una de las celebraciones más comentadas del verano europeo. Pero las denuncias ensombrecieron el festejo y abrieron un debate sobre los límites de las fiestas VIP organizadas por celebridades.