Emma Heming, esposa de Bruce Willis, compartió cómo la demencia frontotemporal del actor la obligó a tomar decisiones complejas para su cuidado. Según relató, debió mudarlo a una casa de una sola planta, aislado temporalmente de la familia, para garantizar asistencia continua. "Después de recibir el diagnóstico, necesitaba desesperadamente apoyo. Solo nos dieron un folleto sobre su condición y nos dijeron que actualmente no hay tratamientos disponibles", confesó Heming al medio británico ABC News.

Un libro para guiar a otros cuidadores

Basándose en su experiencia personal, Emma escribió "El viaje inesperado: Encontrar fuerza, esperanza y a uno mismo en el camino del cuidado", que se lanzará el 9 de septiembre. Su objetivo es ofrecer guía y contención a otros cuidadores que enfrentan situaciones similares, evitando que se sientan tan solos como ella se sintió al principio.

La actriz destacó la importancia del apoyo familiar, incluyendo a la hijastra de Bruce, fruto de su relación con Demi Moore, quien la ayudó a encontrar una terapeuta ocupacional especializada en demencia.

Momentos de felicidad y adaptación familiar

A pesar de la enfermedad, Emma asegura que Bruce sigue activo y de buena salud general, aunque su lenguaje y cognición se han visto afectados. La familia ha aprendido a comunicarse de manera diferente con él, apreciando cada instante de alegría. "Aún tenemos esos momentos de felicidad. Es su risa, el brillo en sus ojos... y simplemente me transporto. Es difícil porque tan rápido como aparecen, se van", relató al diario The Guardian.

Emma subrayó que la mudanza fue la decisión más difícil, pensada para adaptar la casa a las necesidades del actor y preservar el bienestar de sus hijas.