Los mensajes más insólitos que recibió Darín tras el escándalo de las empanadas
Ricardo Darín rompió el silencio sobre el fenómeno viral de las empanadas. El actor explicó que la polémica nació de una simple charla doméstica con su esposa, desatando una ola de mensajes insólitos de sus fans y revelando un dato inesperado sobre su gusto personal.
Lo que comenzó como un simple diálogo matutino en la cocina de Ricardo Darín con su esposa, Florencia Bas, terminó convirtiéndose en uno de los fenómenos virales más grandes del año: la polémica de las empanadas. En una entrevista con Mario Pergolini en Otro día perdido (eltrece), el actor desclasificó el origen de la frase que se le "clavó en la médula".
La pregunta de Florencia sobre el precio de una docena de empanadas, y la posterior respuesta de Darín ("Me pareció caro, pero todo me venía pareciendo caro"), fue la chispa. El actor pensó que era una "gilada", pero subestimó por completo el alcance.
"En 48 horas no lo podía creer", confesó Darín al recordar la magnitud de la repercusión en redes y medios. Lo que más lo sorprendió fue la reacción directa del público, que se sintió interpelado por el tema.
Los Mensajes Más Absurdos y el "Descalabro"
El furor de las empanadas no solo generó memes, sino también una catarata de mensajes insólitos que llegaban directamente al actor. Darín relató que la gente, sintiéndose cómplice de su sorpresa ante los precios, le enviaba advertencias y ofertas desde distintos puntos del país: "La gente me mandaba mensajes. ‘Ricardo, vení a San Justo, que la docena sale 12 mil pesos'; ‘Ricardo, querido, te están afanando'".
El actor definió todo lo ocurrido como un "descalabro". La viralización fue tal que la marca de empanadas supuestamente visitada por su familia registró un aumento de ventas, mientras que en las redes se popularizó el personaje de dibujos animados "Empanadarín". Darín, con su característico humor, se tomó muy bien el chiste: "Me gustó mucho el dibujito de Empanadarín. Empanadarín estaba genial. Muy respetuoso, de muy buen gusto. Me encantó".
El Dato Más Inesperado del Actor
El punto más cómico de la charla llegó cuando Pergolini le preguntó si, después de todo el revuelo, le resultaba difícil salir a comprar una docena. La respuesta de Darín, lanzada con la naturalidad de un giro de guion, fue la frutilla del postre que nadie esperaba: "No, yo no compro empanadas. No me gustan las empanadas", retrucó el actor.