Apple llegó a un acuerdo para pagar 95 millones de dólares y cerrar una demanda colectiva que la acusó de espiar ilegalmente a los usuarios a través de Siri, el asistente virtual de los dispositivos iPhone, iPad y Mac. La denuncia, presentada en 2019, alegaba que Apple interceptó y revisó conversaciones privadas sin consentimiento.

El caso, que se prolongó durante casi seis años, se resolverá con este pago millonario, según informó The Guardian. La acción judicial acusaba a Apple de compartir fragmentos de grabaciones con contratistas externos, quienes analizaban los audios para mejorar el funcionamiento del software.

¿Qué descubrió la demanda sobre Siri?

Los demandantes señalaron que Siri grababa sin haber sido activado con el famoso "Hey Siri" o "Oye Siri", capturando conversaciones íntimas, consultas médicas e incluso encuentros sexuales. El problema radicaba en que el asistente se activaba accidentalmente por palabras o sonidos similares.

Entre las denuncias más resonantes se encuentra la de una mujer que afirmó que Siri grabó a su hija menor de edad y, posteriormente, el navegador Safari comenzó a mostrar anuncios relacionados con lo conversado. Otros usuarios reportaron situaciones similares, donde Siri activaba el modo escucha sin ser invocado.

La contradicción de Apple

Uno de los puntos más críticos en la demanda fue la contradicción entre estas prácticas y la campaña de marketing de Apple, que promovía la privacidad como uno de sus pilares. "Lo que sucede en tu iPhone se queda en tu iPhone", prometía un anuncio de la empresa en 2019. Tras el escándalo, Apple reconoció:"No hemos estado cumpliendo en forma plena con nuestros altos ideales".

¿A quiénes afecta este acuerdo?

El acuerdo cubre a los usuarios con dispositivos Apple que utilizaron Siri desde el 17 de septiembre de 2014 hasta el 31 de diciembre de 2024. Apple asegura haber eliminado permanentemente las grabaciones no autorizadas y publicó guías sobre cómo desactivar la función "Mejorar Siri", que recopila audios para optimizar el software.