La actriz, cantante, performer y ahora, nuevamente coach de La Voz Argentina, se encuentra en un punto de plenitud en su vida: "Me emociona que la gente me quiera como soy", comentó. Viene de llenar dos Vélez, lanzó su sexto disco No vayas a atender cuando el demonio llama, y se prepara para una temporada especial del reality musical de Telefe junto a Soledad Pastorutti, Miranda! y el debutante Luck Ra.

Con el barrio de Parque Patricios siempre a cuestas, Lali se muestra libre, genuina y enamorada: "Cada vez me siento menos atada a ser lo que otros esperan. Soy yo, con mis luces y mis sombras".

Una nueva temporada de La Voz

Vuelve al jurado de La Voz Argentina por tercera vez, y no piensa dejar pasar la oportunidad: "La tercera es la vencida", bromea, pero con picante. Sabe que el nivel es alto y la competencia, feroz: "Soledad es la campeona, pero vengo a dejarlo todo. ¡Basta Sole!"

Con la incorporación de Luzu TV y Nico Occhiato al formato, esta edición promete una experiencia multiplataforma: "Me copa la fusión. Luzu tiene una comunidad gigante y la rompe. Es la combinación perfecta".

Lali no se guarda nada y admite usar toda su astucia para convencer a los participantes: "Soy muy manipuladora, les digo que si no me eligen renuncio (risas)". Y aunque lo dice en broma, deja claro que su propuesta se basa en experiencia real: seis discos, escenarios llenos y una carrera que no para de crecer.

LAS CRÍTICAS HACIA LALI

Comparte su vida cotidiana con Pedro: "No es solo lo pasional: es admiración y compañerismo", dice sobre él. También cuenta que él se encarga de la cocina y ella del vino y las charlas: "Eso también es amor".

Frente a las críticas o los ataques, incluso cuando vienen desde la cima del poder, responde con claridad pero sin confrontar desde el odio: "No me asusté cuando el presidente me mencionó. Me impactó, pero yo sé quién soy. Trabajo desde que tengo uso de razón", lanza, en referencia al apodo "Lali Depósito".

Sostiene que no se calla cuando algo le parece injusto: "Siempre me expresé, pero ahora hay más exposición. No quiero pelearme con nadie, pero sí defender lo que siento que está mal".

"Estoy en un momentazo"

Lali se siente agradecida y consciente del lugar que ocupa: "No me acostumbré al cariño de la gente. Cada show, cada mensaje, cada tatuaje que alguien se hace con mi cara o mis letras, me conmueve".

Sabe que es privilegiada, pero no lo da por sentado: "Hoy tengo todo lo que soñé: hago lo que amo, con gente que quiero. ¿Qué más se puede pedir?"