Mirtha Legrand gritó "¡Viva la libertad, carajo!" frente a Milei en un desfile de Piazza
La conductora, crítica del Gobierno, sorprendió al Presidente al sumarse al clásico latiguillo libertario durante un evento de moda en Buenos Aires.
En medio de la crisis económica y los ajustes del Gobierno, el presidente Javier Milei eligió relajarse este lunes por la noche asistiendo al desfile del diseñador Roberto Piazza, quien celebró sus 50 años de trayectoria en Señor Tango. Lo que nadie esperaba fue el gesto de Mirtha Legrand, quien sorprendió a todos -incluido el mandatario- al gritar en vivo el característico "¡Viva la libertad, carajo!".
La icónica conductora, que en ocasiones anteriores se había mostrado muy crítica con las políticas libertarias, especialmente por el ajuste a los jubilados y a la cultura, pareció cambiar el tono. Su efusiva exclamación provocó la sonrisa inmediata de Milei, quien compartió la velada junto a su hermana Karina, el vocero presidencial Manuel Adorni y la ministra de Seguridad Patricia Bullrich.
Una noche entre la política y la moda
El evento marcó un cruce entre el espectáculo y la política. Piazza, cercano a Milei desde que compartieron un almuerzo en Olivos en febrero, presentó su colección de alta costura 2025, titulada "Bodas de oro".
Pero las sorpresas no terminaron ahí. Durante el programa Argenzuela, Mauro Federico deslizó un dato llamativo sobre Lilia Lemoine, diputada libertaria y figura habitual del círculo presidencial. Según el periodista, Lemoine habría modificado su estilo -dejando atrás los cosplays y adoptando saco, corbata y anteojos- como parte de un intento por conquistar a Milei, quien, según versiones atribuidas a su expareja Amalia "Yuyito" González, habría comenzado a interesarse en perfiles masculinos luego de su encuentro con Piazza.
¿Moda, estrategia o deseo?
Según Federico, Lemoine cree que adaptando su imagen puede conquistar el corazón del Presidente. "Se acomoda el look porque está convencida de que a Milei ahora lo atraen otras figuras. Lo hace para seducirlo", dijo. Rial, por su parte, remató la teoría: "Ella se pone saco y corbata para ver si lo seduce".
El desfile de Piazza, que debía ser una celebración de la moda argentina, terminó siendo una pasarela inesperada de gestos políticos, declaraciones de amor veladas y frases que ya forman parte del folclore libertario.