Todos los hinchas chilenos fueron dados de alta tras los incidentes en la Sudamericana
Más de 20 simpatizantes de Universidad de Chile necesitaron asistencia médica, dos fueron operados de urgencia. Independiente busca despegarse de responsabilidades ante la Conmebol.
Los violentos disturbios ocurridos en el cruce de Copa Sudamericana entre Independiente y Universidad de Chile dejaron un panorama alarmante: más de veinte personas resultaron heridas y dos de ellas tuvieron que ser intervenidas quirúrgicamente por lesiones en la cabeza.
El Ministerio de Salud bonaerense informó que todos los hinchas chilenos que permanecían internados recibieron el alta definitiva en los últimos días. Los afectados fueron atendidos en los hospitales Fiorito, Presidente Perón y Eduardo Wilde, donde los equipos médicos trabajaron de urgencia para estabilizarlos.
Operativos médicos clave
La reacción inmediata de los profesionales resultó determinante. Dos pacientes ingresaron en estado crítico y fueron sometidos a cirugías de emergencia. Según el comunicado oficial, la coordinación del sistema de salud "funcionó en red y salvó vidas". Los casos leves tuvieron el alta a las pocas horas, mientras que los más graves evolucionaron favorablemente con el correr de la semana.
La defensa de Independiente ante la Conmebol
Mientras tanto, la dirigencia de Independiente presentó su descargo ante la Conmebol para evitar sanciones deportivas y económicas. En conferencia de prensa, Néstor Grindetti afirmó que la violencia se desató por iniciativa de la parcialidad visitante y que el club cumplió con todos los protocolos de seguridad exigidos para un encuentro de alto riesgo.
El dirigente expuso cuatro ejes principales: que los incidentes comenzaron con agresiones de los hinchas chilenos, que la institución garantizó las medidas de seguridad, que la vandalización de la tribuna fue premeditada y que la suspensión del partido fue consecuencia directa de esos hechos.