A poco más de dos semanas para el Mundial de Clubes, Miguel Ángel Russo debutó en la cancha como flamante DT de Boca Juniors. Tras destrabar su salida de San Lorenzo, donde dejó el cargo de forma unilateral, el técnico comenzó oficialmente su tercer ciclo en el club de la Ribera.

La primera gran noticia para Russo llegó antes del pitazo inicial: Miguel Merentiel obtuvo la ciudadanía argentina, lo que libera un valioso cupo de extranjero en el plantel. Esto le permite al Consejo de Fútbol avanzar en la contratación de nuevos nombres del exterior. Actualmente, Boca cuenta con los uruguayos Cavani y Saracchi, los chilenos Alarcón y Palacios, y el español Ander Herrera.

Riquelme acelera por Braida y apunta a Mazzantti

Con Merentiel ya nacionalizado, Juan Román Riquelme se mueve para cerrar al primer refuerzo del nuevo ciclo. El apuntado es Malcom Braida, capitán de San Lorenzo. Si bien su cláusula de salida es de 1,2 millones de dólares, Boca buscará negociar con el club azulgrana para no tensionar aún más la relación tras la salida de Russo. Sin embargo, si las gestiones se traban, en el club no descartan ejecutar directamente la cláusula.

Otro nombre que sigue de cerca el Consejo es el de Walter Mazzantti, una de las figuras de Huracán, quien disputará la final ante Platense este domingo. Russo prioriza reforzar los extremos y considera que con estos dos jugadores tendrá cubiertas sus necesidades para el Mundial de Clubes.

Además, no se descarta la llegada de un central y un volante más, sobre todo porque Ayrton Costa aún no obtuvo la visa para viajar a Estados Unidos y el cuerpo técnico quiere alternativas para el medio.

Hinestroza, otra opción del mercado

Con el cupo liberado, Boca también podría avanzar por Marino Hinestroza, extremo colombiano de Atlético Nacional. Si bien la negociación todavía está en una etapa preliminar, podría involucrarse a Jorman Campuzano, actualmente cedido al club paisa y con opción de compra.