River Plate hizo historia en Miami y se consagró campeón de la Messi Cup. En el mismo estadio donde días atrás Lionel Messi levantó la MLS con Inter Miami, la Sub 16 del Millonario derrotó 2-0 al Atlético de Madrid y se quedó con el prestigioso torneo juvenil organizado por el capitán de la Selección.

El equipo dirigido por Martín Pellegrino fue contundente en la final y mostró personalidad ante uno de los gigantes europeos.

Bruno Cabral, figura total del torneo

El gran protagonista fue Bruno Cabral, autor de los dos goles decisivos en la final. El delantero terminó la Messi Cup con siete tantos en cinco partidos y fue elegido MVP del certamen.

Sus números impactan: venía de marcar 34 goles en 28 partidos en Octava División, sumó 10 tantos con la Sub 15 y cerró el año con 51 goles en 38 encuentros. "Me inspiro en Julián Álvarez. Lo más importante es ayudar al equipo", dijo tras la consagración.

Un camino de alto vuelo ante potencias europeas

Para levantar el trofeo, River superó a Inter de Milán, Chelsea y Atlético de Madrid, empató con Barcelona y solo cayó ante Manchester City, en un partido muy parejo. Un recorrido que confirmó el nivel de una cantera que vuelve a posicionarse entre las mejores del mundo.

La base de este equipo ya venía de ser campeón de Octava División, con una campaña demoledora en el torneo local.

Mucho más que un goleador

Más allá de Cabral, el título se apoyó en un funcionamiento colectivo sólido: Joaquín Amor, Felipe López, Valentín Sayago, una defensa firme y la seguridad de Estéfano Sarro en el arco. Un equipo completo que jugó con identidad y personalidad.

Con esta consagración, River no solo sumó un trofeo internacional juvenil: volvió a mostrar su poder formativo y su ambición global. Los pibes dieron la vuelta y dejaron claro que el futuro ya empezó.