La incertidumbre que invade Ciudadela: ¿Qué deparará para el futuro de San Martín?
San Martín enfrenta nuevamente un duro momento futbolístico tras la eliminación en el reducido ante Deportivo Morón. ¿Cómo seguirá el Santo ante una nueva caída?
¿Crónica de una muerte anunciada?, dicen... ¿Será tan así?. San Martín se encuentra transitando nuevamente un final dificil; difícil ni más ni menos que por resultados deportivos que dejó al plantel de fútbol de primera, nuevamente fuera de la posibilidad de ascender a la primera división tras empatar 0 a 0 con Deportivo Morón y no alcanzarle para la clasificación a la siguiente fase.
La realidad es que luego de tantos años de pelearla hasta el final, con una pandemia con 44 puntos que no terminaron siendo válidos, campeonatos siempre arriba en la tabla llegando al reducido y quedando fuera por mínimos puntos, formatos que no favorecían a un equipo con un torneo impecable, y, sobre todo, una final perdida luego de clasificar varias fechas antes, viene destruyendo la vida emocional del hincha y socio, y sin ir mas lejos de los que día a día trabajan por San Martín.
LA GRIETA QUE DEJÓ ROSARIO
Luego de esa final perdida ante Aldosivi, las faltas comenzaron a mostrarse más que nunca. Lo cierto es que si bien la gente, comprensiblemente, se cansó de las frustraciones de siempre llegar y no lograr, transformaron muchas de las faltas personales en una recompensa obligatoria que tenía que brindarles el club. Y lo malo y no entendible no fue eso, sino que toda esa carga pasional y emocional de sentirse desilucionados lo trasladaron a la violencia.
Jugadores insultados, dirigencia amenazada, redes sociales instalando situaciones que no existian pero repitiendolas tan constantemente que hacian creer al del otro lado que necesitaba tapar una falta ya sea individual o del triunfo, pero siempre con una fake; algo que no sumaba en la situación de desazón, y algo que lamentablemente hoy en el ambiente de fútbol se volvió una constante. De "putear" en la cancha como una premisa, a convertirse en una regla.
LOS CAMBIOS QUE TUVO LA INSTITUCIÓN
Futbolísticamente, durante los dos mandatos de esta comisión directiva oficialista al mando de Rubén Moisello, pasaron inumerable cantidad de jugadores, técnicos, managers, preparadores físicos. Se pedían cuestiones específicas para el trabajo de cada uno a su manera, y el club lo cumplió.
La gente pidió un "Delfino", de gran trayectoria, el que sacaba campeones a equipos, el que lograba campeonatos impecables: en San Martín no funcionó. Pidieron un Manager Deportivo, un Alexis Ferrero, ex Santo, el que conocía al club y podia entender sobre el tema: no funcionó. Renombres que no querían volver. Goleadores que en otro lado brillaban y en San Martín no lograban nada. ¿Qué tan real es el peso del Estadio Más Caliente del País en quienes vienen a representar los colores? Nunca se sabrá. Pero sí que se intentó todo, más que nada lo que la gente pedía, se escuchaba, y en la medida de las posibilidades se cumplía; pero no funcionó.
LO QUE QUISO LA GENTE DE SAN MARTÍN
El comienzo de este año, luego del gran golpe del 3 de noviembre de 2024, fue totalmente complicado para quienes querían agarrar una brasa caliente. Fue así que, despues de varias búsquedas y sin respuestas de técnicos "experimentados" y jugadores "de nombre", ser armó un plantel al mando del técnico interino Ariel Martos, apostando a su experiencia y contando a su vez con presupuesto no igual al del año anterior pero priorizando los puestos necesarios y los jugadores del club. Con todo eso y negatividades, rumores y malas predisposiciones en contra, el plantel a cargo de Martos logró varias fechas puntero, aunque para la gente el rendimiento no era el mejor.
Los pro, las contras, los que estaban a favor, los que no, a los que lo perseguían los fantasmas de la final, los que no toleraban una perdida, los que exigian siempre, todo eso y mucho más lograron que un técnico que se puso la camiseta por el club, alguien que comenzó desde abajo, se vaya por decisión propia tras situaciones de violencia que vivió de parte de los hinchas. Una vez más, la gente decidiendo el futuro de San Martín y luego quejándose.
Se trajo otro técnico ex San Martín, alguien con quien se puedan identificar, dar al menos algo de motivación ante la situación que se veía y, sobre todo, a la altura de un campeonato donde el mercado no es tan disponible. Llego Mariano Campodónico, y mucho no pudo hacer. Más que explicaciones, agarró un fierro caliente, y los resultados están a la vista.
¿QUÉ PASARÁ CON LA COMISIÓN DIRECTIVA?
Los rumores desfilan por la Ciudadela. Las oposiciones festejan la caída de un equipo pensando en la política personal. Pocos saben lo que significa agarrar un club y mantener lo que por ahí estos años se logró institucionalmente, aunque los resultados no acompañaron.
La actual comisión directiva, al mando de Moisello, quienes cumplen su segundo mandato en el club, no descarta las posibilidades de dar un paso al costado por el amor a San Martín. No con la cabeza gacha, no huyendo. Valorando todo lo que reconocen haber hecho por el club, que es mucho y poco se ve, y seguramente deseando que se mantenga y mejore siempre por el amor a los colores. Las cosas no están definidas, pero si la consciencia de descomprimir, hacer un movimiento y barajar de nuevo.
La pasión, el amor incondicional sin nada a cambio y con todo en contra también tiene su límite. Ser directivo de un club caliente y arduo como significa en el páis y más en esta provincia promete estar siempre en la lucha, al punto de dejar de disfrutarlo, y eso también forma parte. Lo único que se puede asegurar en los pasillos del barrio más popular son las ganas de quien se quede o quien venga, mantenga y mejore los crecimientos de la institución, y con ello, lo que tanto merece el pueblo sanmartiniano: el ascenso a la primera división.