Pole Dance: qué hay detrás del deporte que cautiva y que cada vez tiene más adeptos

¿Y quién no se acuerda de los bailes de caño de Showmatch? Bailes sensuales, caracterizados por tener poca ropa y que, muchas veces, terminaban en desnudos. Esa imagen construida por la televisión de los 2010 se aleja mucho de la realidad de lo que es el Pole Dance.

Este baile data de hace más de 800 años. Su origen se remonta a la India con el Mallakhamb, un deporte tradicional indio que utilizaba principios similares a los del pole dance actual, donde las acrobacias y bailes se realizaban en altos postes de madera. Luego, este deporte es adoptado en China donde surge la barra china, elemento utilizado hasta la actualidad.

Cuando llega a los Estados Unidos, aproximadamente en la década de 1920, es donde el Pole comienza a caracterizarse por los bailes más provocativos. Durante lo que muchos llaman la "revolución sexual" de los años 60, en los clubes nocturnos de Estados Unidos y Canadá se instalan de manera masiva barras en los escenarios para las seductoras bailarinas y en los 80 comienza a predominar el baile erótico y el striptease completo, con desnudez total.

En 1990, el Pole Dance retoma sus orígenes acrobáticos y comienzan a surgir las primeras olimpiadas de Pole, que se ven como una mezcla entre arte y deporte. En 2003 se concibe como deporte en Europa con la fundación de la primera federación del mundo World Pole Dance Federation (WPDF).

Hernán Rodriguez es un joven tucumano que se desempeña como atleta e instructor de Pole Sport (una rama del Pole Dance). Rodriguez recuerda que se inició en el deporte hace aproximadamente nueve años gracias a, nada más y nada menos, que Showmatch. "Me llamó mucho la atención lo que vi en el programa, pero cuando fui a practicarlo era totalmente diferente, y me terminó de enamorar. Eran trucos de flexibilidad, fuerza, debías tener destreza. No era solamente lo que se veía", recuerda.

¿Arte o deporte? Hernán explica que es una combinación de ambas. Posee una parte técnica muy fuerte, que es lo que se tiene en cuenta en las competencias, pero a su vez, puede ser llevado a lo artístico mediante el baile, la puesta en escena y la actuación, donde también es indispensable el vestuario y la música.

El Pole es mucho más que la técnica y la fuerza: es seguridad y confianza en uno mismo. "En el Pole encontré un amor propio único. Al principio llegás y decís 'no, yo voy a hacer con remera porque no me gusta mi panza' o 'yo no me saco el pantalón porque tengo celulitis', pero de a poco el deporte va logrando que te aceptes a vos mismo", reflexiona. Y esto se debe a que aquí se trabaja principalmente con la piel, ya que esta es la que permite un mejor agarre con el caño.

Al principio de esta nota se hablaba mucho sobre el hecho de que las mujeres eran quienes dominaban el baile del caño, sin embargo, Hernán con mucho orgullo nos demuestra que eso cambió. Hombre y mujer son aptos para este arte y cada uno de ellos cuenta con una ventaja indiscutibles: los hombres poseen más fuerza y las mujeres, más flexibilidad.

EL POLE EN TUCUMÁN

En Tucumán existen grandes representantes a nivel nacional e internacional y Hernán Rodriguez es uno de ellos. En 2022, el deportista se coronó como campeón de Pole Championship Network y dentro de muy poco representará al país en el Mundial de Pole Dance, que se hará en Buenos Aires y competirán 21 países. Además de eso, Hernán pudo hacerse presente en el certamen Got Talent Argentina.

"Tucumán está bien posicionada a nivel nacional. Tenemos a Lucinda Santillán, quien es campeona panamericana, Candela Misano y Marita Navarro son campeonas internacionales. Como si fuera poco, en Argentina tenemos a la mejor poledancer, que es la cordobesa Belén Serra. Ella fue tres veces campeona mundial", detalla.

En ese sentido, explica que muchos atletas se fueron del país y tiene que ver con la forma en que se trata económicamente a los instructores o poledancers, ya que muchas veces no son bien pagados y buscan en otros lugares esa mejora.

Tucumán siempre se ha posicionado como un semillero de deportistas, cantantes y artistas, a esta lista ahora se suman los poledancers: atletas que combinan la fuerza con lo artístico y que se animan a desafiar estereotipos y fronteras incluyendo la física.