Un debut complicado ante un rival de peso

La Selección Argentina de minifútbol, con la presencia destacada de los rosarinos Luciano Monserrat e Ivo Kraljev, inició su camino en el Mundial que se juega en Bakú, Azerbaiyán. El debut fue ante República Checa, un conjunto experimentado y firme aspirante al título.

Aunque el resultado fue adverso (2-1), el equipo nacional dejó buenas sensaciones para los próximos encuentros del Grupo G, donde aún mantiene intactas sus chances de avanzar de fase.

Una primera mitad pareja y con chances para ambos

Argentina salió a jugar sin demasiada preparación previa, pero con mucha actitud. A los 17 minutos, Matías Gasperini generó la primera gran ocasión de gol. Poco después, el elenco checo respondió con una llegada clara.

Con un estilo de juego similar al futsal, República Checa mostró un equipo compacto y ordenado, pero el empuje argentino equilibró las acciones. Sin embargo, a los 22 minutos, un infortunio marcó el 1-0: un gol en contra de Guillermo Faidutti puso en ventaja a los europeos.

Reacción albiceleste y un cierre con sabor amargo

En la segunda parte, Argentina se animó a más. La calidad de Nicolás Lo Giudice, la visión de juego de Monserrat y el despliegue incansable de Kraljev permitieron que el equipo ganara metros en ataque.

A los 9 minutos, Monserrat filtró un gran pase para Faidutti, quien se redimió del error inicial y convirtió el empate. Pero la alegría duró poco: apenas tres minutos después, una mala salida del arquero Rodríguez dejó servido el segundo gol a Padera, quien no perdonó.

A pesar del resultado, la Selección Argentina mostró coraje, sacrificio y pasajes de buen juego ante un rival que apunta al campeonato.

Lo que viene para Argentina en el Grupo G

El próximo compromiso de Argentina será el sábado ante Georgia, en un duelo clave para mantener vivas las chances de clasificación. El cierre del grupo será el lunes, frente a Emiratos Árabes Unidos.

La palabra de UNO DE LOS DELEGADOS: bronca pero esperanza

En diálogo con Enterate Noticias, el delegado Chino Martí expresó su malestar por el resultado, pero valoró el rendimiento del equipo: "Tenemos una bronca bárbara por el resultado. Enfrentamos a un equipo que se preparó y que tiene la obligación de salir campeón. Hicimos un buen partido. Esto sigue y tenemos que apuntar a los dos partidos que nos quedan para tener la esperanza de avanzar de ronda", señaló el tucumano desde Bakú.