La calma del sur de París se vio alterada el lunes por la noche cuando dos personas irrumpieron en las instalaciones del equipo Alpine, ubicadas en Viry-Châtillon, en el departamento de Essonne. Según informó Le Parisien, el hecho ocurrió cerca de las 22:00, cuando los intrusos rompieron una ventana del hall principal para entrar al edificio.

Una vez adentro, se dirigieron directamente a las oficinas de dirección, donde trabajan los ejecutivos y responsables del histórico equipo francés de Fórmula 1.

Accesos forzados, pero ningún objeto robado

Fuentes policiales confirmaron que varias puertas internas fueron forzadas, lo que indica que los intrusos recorrieron distintas áreas del complejo. Sin embargo, no se registraron robos: no faltan documentos, ni equipos, ni elementos de valor.

"No se robó nada. Todo está bien. No había empleados presentes en ese momento", indicaron desde el entorno de Alpine. Una fuente ligada a la investigación reiteró que no hubo sustracción de objetos.

Una salida rápida y la hipótesis de espionaje industrial

De acuerdo con las primeras pericias, los dos sujetos ingresaron por un lateral del edificio, a metros de la autopista A6, y se marcharon pocos minutos después. "Quizás cinco minutos", relató un testigo al medio francés.

Aunque el episodio no dejó daños materiales importantes ni heridos, la División de Delitos Territoriales tomó el caso y los especialistas forenses ya trabajan en el lugar para determinar qué buscaban los intrusos.

Si bien el robo quedó prácticamente descartado, no se omite la posibilidad de una maniobra de espionaje industrial, una práctica sensible en la Fórmula 1, donde cada avance técnico se guarda con extremo hermetismo. Por ahora, no hay detenidos y la investigación continúa abierta.