Matías Orihuela, flamante incorporación de San Martín de San Juan y ex jugador de Atlético Tucumán, quedó en el centro de la polémica tras protagonizar un violento episodio con efectivos de tránsito en Mendoza. El futbolista fue detenido el lunes por la mañana en la ruta nacional 7, a la altura de Potrerillos, luego de una serie de hechos que derivaron en una imputación por lesiones y resistencia a la autoridad.

Según informaron fuentes policiales, todo comenzó cuando el lateral cruzó una doble línea amarilla a bordo de su camioneta y fue detenido por una patrulla. Al solicitarle la documentación, Orihuela habría reaccionado de forma agresiva, negándose a colaborar y profiriendo amenazas.

La versión policial: forcejeos, gritos y un acta rota

El parte oficial indica que el futbolista descendió del vehículo en estado de exaltación. En medio del operativo, uno de los efectivos, identificado como el Oficial Ayudante Cañizares, recibió un golpe en el rostro, supuestamente provocado por la violenta apertura de la puerta del rodado, seguida de una agresión directa.

Testigos señalaron que Orihuela se identificó a los gritos como jugador profesional, rompió el acta de infracción frente a los presentes y se negó a firmarla. La situación escaló al punto de que debió ser reducido. Según el informe médico, el policía resultó con heridas leves tras el enfrentamiento.

Orihuela habló desde la comisaría: "Me agredieron sin razón"

Desde la Comisaría 11° de Luján de Cuyo, donde quedó alojado, el jugador envió audios con su versión de los hechos. 

"Estaba con mi mujer y mi hija, disfrutando del día libre, y sin motivo me bajaron del auto y me agredieron. Nunca falté el respeto", expresó Orihuela.

El futbolista también compartió una imagen de su rostro tras la detención, donde se lo ve con lesiones visibles. Desde San Martín de San Juan salieron a respaldarlo y emitieron un comunicado en el que calificaron el procedimiento policial como "arbitrario e ilegítimo".

La causa sigue su curso

El fiscal Horacio Iturbide, a cargo de la investigación, ordenó la inmediata detención de Orihuela y solicitó que se incorporen los videos del hecho al expediente. Las imágenes, que ya circulan en redes sociales, serán claves para determinar responsabilidades.

Mientras tanto, el club sanjuanino sigue de cerca la situación legal de su refuerzo, que pasó de un anuncio de bienvenida a una detención mediática en menos de una semana.