¿El deporte puede ser una salida en Tucumán?
Si el deporte es un escape a la pobreza, en una provincia con tantas otras necesidades, esa salida parece ser demasiado angosta.
Parecería que corren desde atrás. Los atletas saben que el talento no llega lejos si no hay recursos. Si el deporte es un escape a la pobreza, en una provincia con tantas otras necesidades, esa salida parece ser demasiado angosta.
"Esta vez conseguí el apoyo de José Cano, que me ayudó para que pudiera competir, pero si no, aquí nadie te ayuda", cuenta Ezequiel Casalicchio, el boxeador rosarino que desde los 12 años se radicó en Tucumán y que pelea por nuestra provincia.
Conocido como "Danger", por la fuerza de sus golpes y por el peligro que corre el rival de recibir un uppercut que lo haga caer a la lona.
Pero el talento también necesita respaldo, y muchas veces eso es más difícil que salir a entrenar todos los días después del trabajo. Al agradecer a Cano, "Danger" no olvida mencionar las veces que fue llamado por otros "para la foto con la plaquita" y luego "gracias y hasta luego". Ese cross apunta a la Secretaría de Deportes.
No solo lo dice él: hay un reclamo generalizado, sobre todo por la falta de estructura en muchas otras disciplinas como el futsal, el handball o el vóley.
El deporte es un área más de la política. Quizás no sea la más urgente, pero no por eso deja de ser importante: para muchos es una herramienta de inserción social y, para los elegidos, un camino de ascenso que incluso puede llevar a la fortuna económica.
"Danger" conoce lo primero. Reconoce que el boxeo le ayudó a centrarse, pero también siente que, a pesar de sus 16 victorias (10 de ellas por K.O.) y de haber peleado en transmisiones de TyC Sports y FOX Sports, aún hoy no tiene nada garantizado. Sabe que no siempre será joven y que llegará el día en el que deba bajarse del ring para siempre, quizás sin haber podido comprobar si podía llegar a ser uno de esos elegidos como el Chino Maidana, Maravilla Martínez o Carlos Monzón. Quiere que los deportistas tucumanos tengan la chance de probarse a sí mismos.
Otras prioridades
El deporte no es una prioridad para la provincia. Ese dato es de público conocimiento y reconocido por el mismo gobernador, que explica que Tucumán tiene otras prioridades, algo que también es innegable.
Cuna de la UNT y sede de la UNSTA y la San Pablo T, Tucumán es mucho más que un polo universitario: es la verdadera docta del norte argentino. El mantenimiento de las universidades nacionales corresponde a la Nación y el de las privadas a sus dueños, pero la provincia igual debe brindar estructura y servicios para albergar a estudiantes foráneos.
La salud fue otra prioridad. En 2016, durante el gobierno de Juan Manzur, se realizó una fuerte remodelación de los hospitales Padilla, Centro de Salud y Avellaneda. Se convirtieron en nosocomios de alta complejidad y en una alternativa a los centros médicos de Buenos Aires como el Garrahan o el Italiano.
En 2020, con la pandemia, se volvió a invertir en salud. La entonces ministra Rossana Chahla comandó un sistema de vacunación que se destacó a nivel nacional: para enero de 2021, los tucumanos ya podían solicitar la tercera dosis cuando en gran parte del país todavía esperaban la segunda.
Pero también durante la gestión Manzur hubo áreas descuidadas. La provincia padeció una de las épocas más cruentas de crímenes entre 2018 y 2021, con cifras que rondaban los 180 homicidios por año. La cara de esa derrota fue el ministro de Seguridad Claudio Maley, sostenido en el cargo a pesar de los reclamos ciudadanos hasta que la ministra nacional Sabina Frederic lo convocó para un cargo en La Rosada.
Las crónicas de 2020 reflejan al menos dos grandes manifestaciones en Plaza Independencia, incluso en plena pandemia: fueron tras los crímenes de Facundo Fabersani y Ana Domine.
Resolver la emergencia de seguridad fue el gran desafío que heredó el gobernador Osvaldo Jaldo. Una de sus primeras acciones fue nombrar a Eugenio Agüero Gamboa como ministro y a Joaquín Girvau como jefe de Policía. Aunque hubo cuestionamientos, la tasa de homicidios bajó considerablemente y apaciguó las aguas. Esto fue reconocido incluso por Federico Agustín Pelli, candidato a diputado de La Libertad Avanza y especialista en seguridad, que destacó la mejoría en el programa El Avispero, aunque aclaró que Tucumán aún no está ni cerca de ser un lugar seguro.
Con una realidad así, pensar en una política deportiva sigue pareciendo lejano.
¿Hay lugar para el sueño de los deportistas?
En entrevista con Enterate Ahora, "Danger" defiende su deporte, pero también anhela que todos los atletas tengan una oportunidad de probar hasta dónde llega su talento. Remarca la importancia de que los chicos se involucren: "los que sean, si les gusta el ballet, que bailen", ejemplifica, recordando que no todo es fútbol o rugby en nuestra provincia.
Menciona un proyecto de becas deportivas que le comentó Cano para jóvenes de 14 a 21 años y que incluiría disciplinas menos visibilizadas, aunque para concretarse deberá ser analizado en el recinto.
Por sobre todo, Casalicchio sueña con abrir su propio gimnasio. "Antes este deporte era muy cuestionado, teníamos la mala fama de que si ibas a un gimnasio de boxeo te iban a lastimar y no ibas a querer volver. Hoy cambiaron las cosas, existe el boxeo recreativo que incluye a personas mayores, a niños y mujeres. El boxeo recreativo te mantiene físicamente bien y, si bien es un deporte de contacto, también es muy completo", explica.
El boxeador comparte el sueño que pudo materializar la "Locomotora" Oliveras con su propio gimnasio.
"Ella es un ejemplo de todo lo que podemos lograr. Empezó desde muy abajo; yo sé lo que es pasar por eso, pero además a todo su talento se le sumó el apoyo para poder competir. Mirá el resultado: terminó marcando un antes y un después en el boxeo, peleó en cinco categorías diferentes y ganó en todas".