Después de la derrota ante Instituto en Córdoba y en medio de una semana larga de entrenamientos, Lucas Pusineri recibió una noticia que trajo alivio y optimismo en el mundo Decano. Renzo Tesuri volvió a entrenar con normalidad junto a sus compañeros, luego de más de ocho meses de inactividad por una grave lesión en una de sus rodillas.

El volante nacido en Gualeguaychú sufrió la rotura de ligamentos el pasado 4 de febrero, en el duelo ante Deportivo Riestra, y desde entonces atravesó una extensa recuperación. 

Este regreso a los trabajos grupales, tras 245 días, representa un paso clave en su puesta a punto para volver a las canchas. La idea del cuerpo técnico, médicos y del propio jugador es que Tesuri pueda tener minutos en los últimos dos compromisos del torneo Clausura, ante Godoy Cruz y Lanús, aprovechando además el parate que habrá por las elecciones nacionales para continuar con su preparación física y futbolística.

La vuelta del entrerriano genera alegría en todo el plantel, no solo por lo que puede aportar desde lo futbolístico, su despliegue, dinámica y desequilibrio por la banda derecha, sino también por el aprecio que se ganó dentro del grupo. Con su regreso cada vez más cerca, el Decano suma una pieza i

La importancia de Renzo en el ciclo de Pusineri

Durante el primer ciclo de Lucas Pusineri al mando de Atlético Tucumán, Renzo Tesuri se consolidó como una pieza fundamental en el equipo. Si bien comenzó como una alternativa, su entrega y rendimiento lo llevaron a ganarse un lugar entre los titulares en aquel recordado equipo que peleó el torneo de 2022 hasta las últimas fechas.

Con el entrenador al frente, el volante disputó 49 partidos, en los que marcó 3 goles y dio 2 asistencias, convirtiéndose en un jugador clave tanto por su despliegue como por su compromiso dentro del campo. Por eso, Pusineri celebra especialmente su reincorporación al trabajo grupal, sabiendo que su regreso puede ser un aporte valioso para el cierre del Clausura.