Atlético Tucumán cerró su participación en el Torneo Apertura con una victoria que llegó sobre el final y que le permitió al menos despedirse con una sonrisa. Ya sin chances de clasificar a los playoffs, el equipo de Lucas Pusineri venció 1-0 a Lanús en el Monumental José Fierro gracias a un gol salvador de Franco Nicola en tiempo de descuento.

La emoción no fue solo por el gol en el minuto 94, sino por la incertidumbre posterior: el VAR debió intervenir para corregir un offside mal cobrado y confirmar el tanto, desatando el festejo retrasado de todo el estadio.

Un torneo irregular para el Decano

El conjunto tucumano finalizó una campaña con altibajos, en la que solo pudo sumar 16 puntos tras cinco victorias, un empate y diez derrotas. Pese a los intentos por encontrar regularidad, el equipo nunca logró encadenar una racha que le permitiera pelear por algo más.

Más allá del resultado ante Lanús, el rendimiento colectivo fue una deuda pendiente a lo largo del certamen, algo que seguramente será foco de análisis en el receso.

Lanús ya piensa en los octavos

Del otro lado, Lanús llegó a este partido con la clasificación en el bolsillo. El equipo de Mauricio Pellegrino cerró la fase regular con 20 puntos, fruto de cuatro triunfos, ocho empates y cuatro derrotas, ubicándose en la séptima posición de la tabla.

Ahora, el Granate espera rival en octavos de final, que saldrá del segundo clasificado en la Zona A, entre Boca Juniors y Argentinos Juniors. La definición se conocerá el domingo.

Un cierre antes del receso y elecciones en el horizonte

Más allá del partido, Atlético afronta un receso clave: se vienen elecciones que marcarán el rumbo del club de cara al Torneo Clausura.