Este lunes, Ángel Di María fue presentado como nuevo refuerzo de Rosario Central, marcando así su segundo ciclo en el club santafesino tras su extensa carrera en Europa. A sus 37 años, el mediapunta llega con toda la experiencia acumulada para sumar en el torneo local y aportar liderazgo dentro del equipo.

El recuerdo del Mundial de Clubes y el cruce con Boca

El rosarino recordó su paso reciente por el Mundial de Clubes con el Benfica, donde compartió grupo con Bayern Múnich, Auckland City y, justamente, Boca Juniors. En ese partido debut, Di María anotó un gol que sirvió para el empate 2-2, pero también vivió la intensidad y dureza del fútbol argentino desde el rival.

Adaptarse al ritmo y la fricción del fútbol argentino

Sobre el estilo que enfrentó en ese encuentro con Boca, Di María comentó: "Boca me hizo sentir lo que es el fútbol argentino, con muchos golpes y partidos cortados por infracciones. Sé cómo se juega acá y depende de mí usar mis armas para defenderme y estar al 100% para ayudar al equipo". Además, se mostró consciente del desafío extra que implica jugar en un club grande: "Sé que habrá diferentes reacciones, que me pueden putear o aplaudir, pero hoy estoy con la camiseta de Central y eso es lo que importa."