A 12 años del accidente, Corinna recordó a Michael Schumacher con un mensaje que conmovió al mundo
Desde el grave accidente de esquí en 2013, la vida del siete veces campeón de la Fórmula 1 transcurre bajo un hermetismo absoluto.
Desde hace doce años, la vida de Michael Schumacher permanece envuelta en un estricto hermetismo, consecuencia directa del accidente de esquí ocurrido el 29 de diciembre de 2013 en los Alpes franceses. Aquel episodio marcó un punto de quiebre irreversible tanto en la trayectoria del histórico piloto de Fórmula 1 como en la intimidad de su familia, que desde entonces eligió preservar su privacidad de manera absoluta.
Las lesiones cerebrales severas que sufrió el siete veces campeón del mundo obligaron a una profunda reorganización de su entorno. La vivienda familiar fue adaptada como una unidad médica privada, con atención permanente y costos anuales que superan los siete millones de euros, bajo la coordinación directa de su esposa, Corinna Schumacher, quien lidera cada decisión vinculada a su cuidado.
El mensaje de Corinna que volvió a emocionar a los fanáticos
En un nuevo aniversario del accidente, y mientras miles de seguidores recordaban aquel trágico día, Corinna publicó un mensaje conmovedor en las redes oficiales del piloto.
"Extraño a Michael todos los días. Pero no soy solo yo quien lo extraña. Son los niños, la familia, su padre, todos los que lo rodean. Todos extrañan a Michael, pero Michael está aquí; diferente, pero aquí. Sigue demostrándome lo fuerte que es cada día", escribió.
La publicación se viralizó rápidamente y generó cientos de reacciones y mensajes de apoyo, reflejo del cariño intacto que despierta Schumacher en el mundo del automovilismo.
El accidente que cambió su vida para siempre
El hecho ocurrió cuando Schumacher, acompañado por su hijo Mick, decidió salir momentáneamente de una pista señalizada en la estación de esquí de Méribel. Una roca oculta bajo la nieve provocó la caída y el impacto partió su casco. Los médicos coincidieron luego en que esa protección fue clave para evitar un desenlace fatal.
Tras ser trasladado de urgencia en helicóptero al hospital de Grenoble, se le diagnosticó un traumatismo craneoencefálico severo, con hemorragias y edema cerebral. Fue sometido a dos cirugías y permaneció durante meses en coma inducido, con partes médicos que hablaban de un estado "crítico pero estable".
En junio de 2014, Schumacher despertó del coma y fue derivado primero a un centro de rehabilitación en Lausana, antes de regresar a su domicilio especialmente adaptado.
Un círculo mínimo y silencio absoluto sobre su estado de salud
Desde entonces, la información sobre su estado quedó restringida a un círculo extremadamente reducido. Un equipo médico de hasta 15 profesionales lo asiste las 24 horas, mientras que solo un puñado de personas puede verlo.
Entre ellas se encuentra Jean Todt, exdirectivo de Ferrari y amigo cercano, quien resumió su condición con una frase contundente: "Michael está aquí, pero no es el Michael que solía ser". Según trascendió, Schumacher no puede comunicarse verbalmente y responde únicamente con leves movimientos oculares, lo que indicaría un nivel mínimo de conciencia.
Mick Schumacher, quien llegó a competir en la Fórmula 1, expresó en un documental que daría "cualquier cosa por poder hablar con su padre".
Protección judicial, decisiones patrimoniales y vida lejos del foco público
En 2024, la familia obtuvo una sentencia judicial clave contra una revista alemana que difundió una entrevista falsa generada con inteligencia artificial, marcando un precedente en la defensa de la imagen personal. Ese mismo año, un intento de extorsión tras el robo de material médico fue rápidamente neutralizado por la policía.
Las decisiones económicas, como la venta del jet privado y de algunas propiedades, respondieron a una reorganización patrimonial y de seguridad. Entre ellas, la adquisición de la Villa Yasmin en Mallorca, utilizada como refugio familiar y sede de celebraciones privadas, como la boda de Gina Maria Schumacher en septiembre de 2024, evento rodeado también de absoluto hermetismo.
Actualmente, solo nueve personas tendrían acceso a Schumacher, entre familiares directos, amigos históricos y expilotos, todos comprometidos con el silencio y el respeto por la voluntad de la familia.
A doce años del accidente, el apellido Schumacher sigue ligado a la admiración mundial por la Fórmula 1, mientras su entorno sostiene una rutina marcada por la discreción, la fortaleza y la decisión inquebrantable de proteger la intimidad de Michael.