Una alumna llevó un arma y 150 balas a su escuela en Florencio Varela: investigan el caso

Tiene 16 años, está bajo tratamiento psiquiátrico y volvió a clases después de un año de ausencia. Buscan determinar si planeaba un ataque.

Una situación alarmante sacudió este viernes a la Escuela Secundaria N.º 26 de Florencio Varela. Una alumna de 16 años fue aprehendida luego de que el personal directivo entregara a la policía una mochila que contenía un arma calibre 380 y 150 municiones.

El hecho ocurrió alrededor de las 16:00, cuando efectivos de la Comisaría 3.ª se presentaron en el establecimiento ubicado en la calle Nueva Delli al 1300 tras un llamado al 911. Dentro del bolso de tela que pertenecía a la joven -alumna de tercer año del turno tarde- encontraron una pistola Bersa con cargador y cuatro balas, además de tres cajas con 50 proyectiles cada una.

El entorno familiar, en la mira: la madre dijo que el arma era del padre

Al ser notificada, la madre de la menor se acercó al colegio y aseguró que su hija se encuentra bajo tratamiento psiquiátrico. Ese viernes, justamente, era su primer día de regreso a clases luego de un año fuera del sistema escolar.

Según su testimonio, el arma pertenecería al padre de la adolescente. Ahora, la fiscal María Parodi -del Fuero Penal Juvenil- investiga cómo la chica accedió a ese material y si hubo negligencia por parte de los adultos responsables.

Además de las pericias en curso, también se intenta determinar si la joven tenía intenciones de realizar un ataque en la institución.

Otro caso estremecedor: chats revelan que un grupo planeaba un tiroteo en Escobar

Mientras avanza la causa en Varela, otro caso conmociona a la provincia: en Escobar, un grupo de estudiantes fue descubierto mientras organizaba un tiroteo en la Escuela Secundaria N.º 2 de Matheu. La información salió a la luz gracias a capturas de pantalla de un grupo de WhatsApp que un padre entregó a las autoridades escolares.

En los mensajes, los adolescentes se referían a un plan armado para ese viernes, con amenazas, descripciones del armamento y consignas violentas contra docentes y alumnos. Algunos de los integrantes incluso detallaban las armas que aportarían, entre ellas una pistola Glock, y advertían a quienes no querían participar que no "boconearan" lo hablado.

La justicia caratuló la causa como "averiguación de ilícito" y está tomando declaraciones, además de reforzar la seguridad en el colegio involucrado. Aún no hay implicados formalmente identificados, pero la investigación sigue en curso.

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